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Ibarra, 30 años en la bohemia

Alex Madrigal| El Universal
Viernes 26 de enero de 2007
El intérprete festejó con público y amigos, entre ellos el bolerista Lucho Gatica

Antes de que el cantante Fernando Ibarra saliera a festejar sus 30 años de carrera, las notas que amenizaron su entonación en su camerino fueron Pride (In the name of love), In to the goove y Message in a botle de U2, Sting y Madonna, respectivamente, para después comenzar con la velada romántica.

Luego de una introducción de sus músicos, entre ellos el cantautor Alejandro El Loco Hernández, se escucharon las primeras notas de la canción "Un tipo como yo", al estilo de la potente voz de Fernando Ibarra.

La velada en un bar al sur de la ciudad de México incluyó las canciones de toda su carrera, entre ellas, y de las más ovacionadas fue con la que Ibarra ganó en el festival de música OTI (Organización de Televisión Iberoamericana), en 1998 y escrita por Gerardo Flores, "Voy a volverme loco" y un popurrí de José José.

En la primera canción aprovechó para saludar personalmente a las mesas más cercanas al escenario. Continuaron las canciones "Penélope" y "Por el amor de una mujer".

"Para mí fue un placer tenerlos esta noche aquí. Gracias por venir a compartir una noche especial para nosotros y para mí", fueron las palabras de Fernando Ibarra por sus 30 años de carrera.

Acompañado de sus cinco músicos, los cuales recibieron el calor del público, el cantante mexicalense concedió cada una de las canciones que "su gente" le escribió en servilletas, como "Cantares", para continuar y decir: "¿Quién viene con problemas conyugales?", para dedicarles "Perdón", por qué.

A la mitad del show, el lugar le llevó su pastel, le cantaron las mañanitas y el director del centro nocturno le entregó un reconocimiento de la mano de Antonio Hogaza, hermano de Lucero.

Para cerrar su presentación por sus tres décadas en los escenarios, Fernando Ibarra regresó al escenario para brindar, con su copa en mano, con los más de 200 asistentes, no le faltó ningún rincón, mientras entonaba la canción "Color esperanza".

También dedicó canciones a sus hijos Tamara ("La ley del amor") y Ricardo ("El hijo que soñé"), por ser parte fundamental para su carrera.

Antes de que interpretara "No soy el aire", una de las canciones más pedidas de la noche, agradeció a sus asistentes, y en especial al bolerista chileno Lucho Gatica, ahí presente:

"Esta noche tengo la suerte de contar con muchos amigos, entre ellos, uno que más quiero.

"Recuerdo que cuando era niño, escuchaba en la radio sus canciones. Quiero escuchar sus aplausos a Lucho Gatica, esto es un homenaje que le hago esta noche", finalizó Fernando Ibarra en su día.



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