Se tardó varios meses en encontrar el lugar ideal para la realización del mágico mundo que envolverá a sus Alegrijes y rebujos , telenovela que mañana comienza transmisiones por el Canal de las Estrellas; sin embargo, Rosy Ocampo, productora del melodrama, asegura que el esfuerzo valió la pena ya que ahora puede decir que tiene el único set en México con una estructura de más de 14 metros de altura.

En un recorrido hecho por EL UNIVERSAL en el foro especial que tiene una dimensión de 10 mil metros cuadrados y es iluminado por una planta de 350 kilowatts, Rosy comenta que la construcción pasó por muchas penumbras. Incluso no fue la primera opción que la productora presentó a Televisa para grabar la telenovela protagonizada por Jacqueline Bracamontes, Luis Roberto Guzmán y Héctor Ortega.

"Primero buscamos locaciones. Queríamos algo cerca del DF o en un lugar circunvecino como el Estado de México o Morelos. Sin embargo, había el problema de que encontrábamos una casona pero no tenía enfrente un parque o un lago como el que necesitábamos y que marcaba el libreto. Buscamos cuatro o cinco meses sin éxito.

"Por eso, pedimos autorización a Televisa para construir el set . La experiencia más reciente había sido con Carla Estrada, aunque ahí se había dado por una cuestión de época y de cercanía con la locación. Carla me enseñó la labor que el departamento de escenografía había hecho y llegamos a la conclusión de que era una mejor opción", explica Ocampo.

La labor ha sido titánica, agrega Rosy, desde encontrar el lugar con el suficiente espacio para construir una vieja casona tipo inglés, un parque, un lago y hasta dos calles (Villa Luz y Villa Sombra), hasta pelear con la temporada de lluvias desde mayo pasado, justo cuando su producción y el departamento de escenografía comenzaron a desarrollar el proyecto.

Y es que el trabajo debía salir. Tras hacer diseños y propuestas por más de mes y medio, Ocampo dio el visto bueno para que, luego de encontrar el sitio idóneo, 150 personas comenzaran la construcción del set (cuyos trabajos concluirían tres meses después), donde "vivirán" los personajes principales de la historia original de Palmira Olguín.

"La casa que nos rentaron tenía un gran jardín y su propio ruedo, que incluso adaptamos para que fuera parte del parque. Aunque en la pantalla no se nota, el piso del parque, la cancha de basquetbol y parte de las calles están hechos con cemento falso", acota Rosy.

Mientras sigue el recorrido, enmedio de un intenso sol y todavía con varios técnicos de Televisa haciendo ajustes al lugar, Rosy platica del contrato que firmó con Gloria Hernández, así como los términos del mismo.

"Lo importante es tener respeto por la vida de la familia, sus espacios. A la señora le emociona que esté montado el mundo mágico de Alegrijes y rebujos en su casa. Mucha de su familia ha venido a conocer la locación.

"Cuando terminemos las grabaciones se quitará todo. El contrato de arrendamiento le garantiza que su predio quedará como estaba. Si ellos desean conservar algo, no hay problema", dijo.

Más allá de las ventajas de tener un set especial, Rosy resalta una de sus preocupaciones, que la seguridad de los niños (Miguel, María, Jesús, Diego, Nora, Michelle, Antonio y Allison) no volverá a darle dolores de cabeza, ya que a este maxiescenario solamente tendrá acceso el personal autorizado de Televisa.