En serio: "Toy Story 2" es más entretenida que su antecesora, lo que la sitúa en un pequeño grupo de secuelas que superan a las originales y que incluye clásicos como "El imperio contraataca" y, según muchos cinéfilos entusiastas, "El padrino II".

Es más que aventurado hablar de "Toy Story" en los mismos términos que "El padrino", pero definitivamente es una propuesta que no debe rechazarse.

Si necesitan adjetivos, qué tal los siguientes: "Toy Story 2" es graciosa, conmovedora, inteligente y con una animación extraordinaria; una genuina película para pasar un buen rato.

Además de sus animaciones, se puede decir que se ha añadido un humor que atrae a los adultos.

"Toy Story 2", ofrece una combinación casi imperceptible de historia y bromas que deben ser del agrado lo mismo de niños que de adultos.

La película, incluso, demuestra ser emocionalmente sensible cuando es necesario, al recordarnos que crecer significa dejar atrás algunos momentos entrañables.

Algo que hace la película muy entretenida es que sus creadores entienden el papel de los juguetes en la vida de los niños, el lazo fantástico que establecen con sus favoritos, confiriéndoles personalidad y vida propia.

El director John Lasseter, que trabajó con una legión de expertos en animación de Pixar, realiza un trabajo brillante, pero no descuida el ingrediente principal de cualquier buena película: la historia.

La película maneja un cierto intercambio de papeles. Buzz Lightyear, el robusto hombre espacial, intenta salvar al vaquero Woody, robado por un coleccionista de juguetes que lo vio en un bazar casero; Woody fue secuestrado por el codicioso Al McWhiggin cuando trataba de rescatar a otro muñeco del basurero. Una revelación nos espera: Woody se entera que pertenece a una rara colección de juguetes de los años 50. Los muñecos fueron hechos para complementar un programa de televisión, "Woody s Round-Up". Sin embargo, la serie fue cancelada cuando el Sputnik fue lanzado y el espacio exterior se convirtió en la última frontera.

Woody enfrenta un problema ético. (Así es, los juguetes pueden tener crisis de conciencia).

¿Debe regresar con Andy, el niño que juega con él, o darse el lujo de vivir en la perpetua comodidad de un museo de juguetes japonés?

Andy se ha ido a un campamento de verano, abandonando a Woody, que tiene un brazo desprendido.

El doblaje es extraordinario. Tom Hanks, como Woody, y Tim Allen, que dota a Buzz de sus sinceras entonaciones de héroe.

Se les unen Joan Cusack (como Jessie) y Kelsey Grammer (como el Explorador). También regresan Don Rickles (como el señor Cara de Papa), Jim Varney (como Slinky Dog) y Annie Potts (como Bo Peep).

La voz que se roba la película pertenece a Wayne Knight, en el papel de Al, el sucio coleccionista dueño de una gran tienda de juguetes.

Muchos giros ingeniosos adornan el guión de "Toy Story 2". Por ejemplo, tras reconocer que es un juguete, Buzz Lightyear no sufre más de crisis de identidad.

No puede decirse lo mismo del ejército de muñecos similares a Lightyear que sale a su encuentro en la tienda de Al, quienes realmente creen que su destino es combatir al enemigo mortal de Buzz, el Emperador Zurg.

"Toy Story 2" puede ser un ejemplo sorprendente de animación generada por computadora, una película que define los últimos avances tecnológicos, pero también se puede sentir su naturaleza humana a cada momento. No es la tecnología lo que hace que esta secuela sea muy entretenida, sino su creatividad.

Algunos trucos de animación

Entre los más impresionantes avances tecnológicos y artísticos en "Toy Story" destaca la manera en que los personajes humanos son diseñados y animados.

Un equipo especial de expertos fue reunido para trabajar en los humanos.

"Al Mc Whiggin" el limpiador, "Andy" y su madre, así como varios otros humanos extras que pueblan al mundo de "Toy Story 2". Avances en la representación de la piel y el pelo hicieron que los personajes parecieran reales a pesar de la dirección artística y el estilo de la película optó por una versión caricaturizada de la realidad.

Mitch Prater, el principal director técnico a cargo de crear la piel humana, escribió 750 líneas de código por computadora en un periodo de dos meses. En total el equipo de pintura creó 10 mil imágenes para definir las características de la piel.

Otra innovación de esta cinta tiene que ver con la cinematografía. Los realizadores querían usar movimiento de cámara y profundidad de campo para contar la historia y como resultado la cámara se mueve más rápido que en las películas previas de Disney.