Regresa Imelda Miller Duro contra ellos

. (Foto: EL UNIVERSAL )
YURIRIA, Gto.? A punto de sacar su nuevo compacto Duro contra ellos , Imelda Miller lo anticipa como un disco "tropicalón; casi casi como mentadas de madre; de dolor y contra ellos". Sin embargo, al hablar de su vida muestra una versión ajena a su material discográfico, al decirse "casada con Jesucristo". Quien fuera conocida por éxitos como "El preso número 9" y "Qué alegre va María", entre otros, narra con franqueza, aunque sin perder la cautela, que los 14 años de sobriedad que interrumpió a finales de 1994, volvió a reiniciarlos al dejar de tomar desde la primera quincena de diciembre del año pasado. Entre sonrisas, miradas esquivas y sin perder el tono amable, increpa al ser cuestionada por EL UNIVERSAL sobre su reciente recuperación. "¿Te has fijado cómo está el mundo? El mundo es un peligro. No puedes dar un paso sin que te salga una botella, desgraciadamente; y, en el ambiente de nosotros es más propicio que otros ambientes... (Bueno) todos... ¿eh?, vamos a hablar en general, el mundo entero está, pues no quiero decir que está hecho una mierda, pero casi lo está." Entrevistada en una visita que hizo a esta localidad para apoyar la sobrevivencia de la laguna, la cantante confiesa haber vivido una experiencia muy difícil después de la cual se hizo cristiana, acontecimiento este último, que se llevó a cabo en febrero (próximo pasado). La intérprete yucateca, con 43 años de trayectoria artística, responde todas las preguntas con un semblante tranquilo. ¿Qué te has hecho? Trabajar cuando hay trabajo; descansar cuando descanso. Hoy venimos a colaborar para ver si se puede hacer que este lago sobreviva... ¿Eres ambientalista, ecologista? Ante todo soy mexicana y cuando me invitan a apoyar causas nobles, pues apoyo. ¿Tu familia cómo está? Bien, muy bien, muy contentos, tengo una hija y cuatro nietos. Mi hija se ha encargado de multiplicar la familia. ¿Tienes pareja? No ¿Para qué quiero pareja? Mi pareja es Dios. Ya me casé con mi señor Jesucristo; ya no quiero saber nada de nadie. ¿Tienes algún proyecto en puerta? Está por salir un compacto, en Discos Continental, se llama Duro contra ellos , es lo más nuevo entrecomillas porque tiene números que ya se han escuchado, algunos que grabé hace muchos años y otros de otros artistas. ¿Qué es lo último que has hecho en televisión? Una entrevista en Ventaneando y un programa en Tómbola . Lo que sucede es que si no hay un material qué promover ¿a dónde vamos? Además, he estado delicada de salud desde febrero. Estuve internada en el Hospital Santa Elena, por un problema del oído, todavía estoy bajo tratamiento, me han mandado casi reposo absoluto, aunque no lo puedo hacer porque ¿de qué vamos a comer? He trabajo poco, los medicamentos me tienen hasta el gorro, pero ni modo. Hace muchos años hice un papel pequeño en una telenovela que se llamó Lo imperdonable y algunos capítulos de Yo no creo en los hombres . ¿Y en teatro? Estuve trabajando en teatro experimental hace muchos años, hice Mi mujer necesita marido con Óscar Pulido. Lo último que hice fue En el hombre de la mancha . ¿Prefieres el canto? Estoy inclinada al canto, llevo 43 años cantando ya. Pero sí me interesa (la televisión). Los artistas no debemos despreciar nunca nada, pero necesitaría un papel muy especial para una señora de mi edad (60 años, siguiendo un artículo de la página electrónica de la revista "Galeríasnet"). (Y ahora) escriben papeles para gente joven; se promueve mucho la juventud. Pero seguimos cantando. Sobre tu nuevo compacto... Es ritmo tropical. Tropicalón, se llama Duro contra ellos , casi casi como mentadas de madre; de dolor y contra ellos. Hay una canción que es mía, que se llama "Ni vales tanto" pero que también es de reclamo, duro contra ellos, esta canción se llama originalmente "¿Qué está pasando?", pero estuve analizando y llegué a la conclusión de que se debería llamar "Ni vales tanto", aunque creo que le va entre paréntesis el título original, bueno a ver si me respetan la petición. "Viene una que es totalmente distinta `Pecado mortal`, de Doris Aguian, es un bolero, está muy bonita esa grabación, no tiene nada que ver, se sale del contexto del compacto. Pero es una canción que a mí me ha gustado mucho y, de ella (Doris Aguian), pusimos una balada y un bolero, que se hizo tropical, se llama `¿Quién?`." ¿Cómo está el trabajo para los cantantes de bolero y de lo que tú cantas? Está difícil el trabajo pero no es por el tipo de música, porque ahí tienes a Paquita "la del barrio", cantantes como Paquita nacen cada 40 ó 50 años, baladistas como yo hay muchas y se dan por temporadas y ahorita la música ha tenido un cambio. "Nosotros seguimos trabajando, como quiera que sea. Mira, le doy gracias a Dios de seguir trabajando todavía, de seguir cantando, de tener estos eventos (ecologistas)." ¿Qué espectáculo presentas? A veces trabajo con un piano, con secuencias, cuando los lugares son más grandes con cuatro músicos. ¿Cuándo es el momento del éxito para tu carrera? Tuve nueve o diez años de dar éxitos, canciones que no se parecían nada una con la otra, porque "Cuéntale" era un vals, "El preso número 9", un huapango y "Una noche no" un bolerito, pero cuando estás vivo piensas en tener otro momento de triunfos y siempre está uno buscando alcanzar otras metas. ¿Tal vez en los 70 viviste el mayor esplendor? Quizá. Lo que ha cambiado es el espectáculo, los cantantes seguiremos cantando mientras podamos. El tipo de espectáculo es lo que ha cambiado. Ya hay pocos bares que le puedan pagar un sueldo a los músicos. Ahora le pagan más al artista y por eso pueden ellos montar sus espectáculos. No obstante a las dificultades para hallar trabajo, Imelda Miller encuentra porque su estilo gusta en muchas partes del país. "La situación está crítica este año. Se ha sentido. He trabajado, pero no al mismo ritmo que el año pasado, me he presentado ocho veces, teniendo en cuenta que para los artistas el primer trimestre del año es muy malo. Trabajé el 10 mayo. Estuve en Nogales... ¿Y palenques? Participé mucho tiempo en palenques pero me abandonaron. Todos los espectáculos están controlados, ciertos representantes los tienen controlados. ¿Cuándo sale tu nueva producción? Esta semana. La disquera me grabó hace 19 años algunos materiales, lo ha vendido y lo sigue sacando, con eso te doy una idea de cómo funciona Imelda Miller en ventas, si yo no vendiera no sacaría material durante 20 años, tengo un disco con éxitos de Juan Gabriel, un garbanzo de a libra, pero hay gente tan talentosa, sólo falta que se les de la oportunidad, pero así trabaja la compañía. Tengo un disco de mis éxitos, con los que el público me favoreció. ¿Vas a hacer alguna presentación en breve? Por ahora no. La compañía me habla. Me paga una cantidad. Hago la aclaración, yo no recibo regalías, porque, pues ciertos problemas, hay gente muy curiosa, muy metiche y tampoco tengo que andarles contando de mis arreglos con las disqueras. "Eso es lo que hacía Pedro Infante (decía) "a mí dame tanto y tú haz lo que quieras con el disco". A mí me conviene que el disco se venda, a mí me conviene que el disco se escuche y me conviene que la compañía gane dinero y yo tener un material discográfico a la mano qué ofrecer. Eso es ganancia para mí." ¿Tienes un disco de platino, de oro...? No. Actualmente la venta de los discos es muy obvia, entonces ya las compañías tienen que ser más derechas, dentro de todo. Imagínate a qué nivel ves a un Luis Miguel o a un Alejandro Fernández, no le pueden decir "no has vendido" porque él se va dar cuenta de que sí está vendiendo, si él se oye en Estados Unidos y en Centroamérica. Estos reconocimientos surgieron porque es muy obvio, ya la televisión se ha abierto al mundo entero, ya no pueden decirte que venden cinco mil discos a la semana y darte un monito o un diploma. "Antes eran menos obvias las ventas y no le ibas a meter una auditoría a la disquera. Además, que para que ya te digan que vendiste un millón de discos es porque vendiste dos, eso te lo puedo garantizar." ¿Cambiaste de religión? Desde diciembre del año pasado puse mi vida en manos de Dios, le dije "yo ya no puedo manejar mi vida, tú ayúdame a manejarla". Y en febrero llegó al hospital la pastora de la congregación a donde voy y allá me ungieron. Ya era cristiana, pero si no te lo están repitiendo se te olvida que eres cristiana. Pero esta vez ya no se me va a olvidar. ¿Tuviste una experiencia difícil? Bastante difícil. Había empezado a tomar otra vez. Le supliqué a Dios "sácame de aquí porque si no, yo ya no quiero vivir". Y mi señor afortunadamente me escuchó. Ya no se me antoja tomar una copa. Tengo seis meses sin tomar una sola gota de alcohol. A pesar de que dejé de tomar en la primera quincena de diciembre, empecé en el cristianismo en febrero. Pero ¿si ya te habías recuperado? Pero todo por servir se acaba. Bueno, soy un ser humano. Afortunadamente todavía hay gente que se quiere salvar. Ahora, en el cristianismo, conozco mucha gente joven a través de sus discos, de su música, de sus experiencias; muy joven, que se está pegando a Jesucristo, que está saliendo de sus problemas. Jóvenes drogadictos, que componen canciones que hacen llorar, que me hacen decir ¿qué habrá pasado esta criatura para que pudiera escribir esta canción? Te recomiendo a un chavo, Marcos Vidal, español. Creo, compositor. ¿No funcionó Alcohólicos Anónimos? A mí sí. Durante 14 años de maravilla. Me salí. Tal vez necesitaba volver a caer para pegarme a Dios. Dejé de beber en el 80 y volví a tomar a finales del 94. No tomaba a ponerme tan grave, pero me sentía mal, incómoda. ¿Te excedías? No. Al menos trataba de no hacerlo, pero a lo mejor se me pasó la mano algún día... No sé... Y la charla termina en medio de la sonrisa franca de una mujer que ha sabido enfrentarse a la vida, que se ha tropezado y ha vuelto a levantarse...





