Los autos y una nunca suficiente dosis de arriesgadas maniobras son la clave de éxito de esta serie que ya tiene seis películas estrenadas y que ha recaudado 2 mil 300 millones de dólares en todo el mundo.

Esa cifra debería aumentar fuertemente a partir de mañana, cuando llegue a los cines locales una nueva entrega. Sin embargo, "Rápidos y furiosos 7" se terminó convirtiendo en mucho más que un capítulo más.

La muerte de Walker no solo significó un duro golpe emotivo para el elenco que encabeza Vin Diesel. También propuso un gigantesco desafío para el equipo que lideró el director James Wan ("El conjuro") , en su debut en la saga.

El resultado fue un sentido homenaje que dedica varios minutos del final del filme a despedirlo.Se usaron imágenes de episodios anteriores para completar escenas que quedaron pendientes y los hermanos del fallecido actor, Cody y Caleb, sirvieron como dobles para otras.

Además, Weta Digital, la empresa de efectos especiales de Peter Jackson, generó un Paul Walker digital. En todo caso, ni el estudio (Universal) ni la compañía han entregado detalles sobre las secuencias específicas que fueron manipuladas.

Lo cierto es que Paul Walker digital no se nota mayormente. Un ojo quisquilloso podría ver cierta animación en la secuencia final del filme, cuando el elenco principal se entretiene a la orilla de una playa. Luego, la voz de Vin Diesel dedica sensibles palabras que destacan la inmortalidad de la amistad y la hermandad.

El filme no termina con la muerte de su personaje, Brian O'Connor, sino con un feliz retiro de la vida peligrosa.

ml