James Bond, discreto y con el mínimo de seguridad
Discreto y con el mínimo de seguridad, el actor Daniel Craig dejó las instalaciones del Gran Hotel de la Ciudad de México, en el cual tuvo llamado el día de hoy para continuar con el rodaje de la reciente película de James Bond, Spectre.
Eran las 8:00 horas de la mañana, cuando el intérprete de James Bond se asomó a uno de los balcones del hotel que dan al Zócalo capitalino, acompañado por el director Sam Mendes, para observar durante algunos minutos la ceremonia de izamiento de la bandera de México, que cada mañana realizan miembros del Ejército, para después volver al interior de la habitación.
Una hora después, Sam Mendes salió de nueva cuenta al balcón del segundo piso para observar hacia la plancha de la Plaza de la Constitución, dónde personal de escenografía trabajaba colocando flores de cempoalxóchitl de papel, en la Catrina y nueve calaveras gigantes que ahí se instalaron.
Conforme las horas iban pasando el movimiento por parte de la producción continuaba, pero ahora todo se iba concentrado en las instalaciones del Gran Hotel de la Ciudad de México. Durante todo el día extras y personal técnico entraban y salían del hotel, y el acceso estaba prohibido para cualquier persona ajena al proyecto fílmico. Desde la calle se podía ver un poco de la acción que se desarrollaba en el lobby, pero sin que Daniel Craig diera indicios de su presencia.
Al mismo tiempo en la calle de Donceles, a unos metros del antiguo edificio del Senado de la República, parte del equipo técnico trabajaba en un set que simulaba una zona de desastre a las afueras del Teatro Fru Fru, que por motivos de la película en su marquesina se lee el nombre de Teatro Arriba. Escombros y vehículos destruidos obstruían la calle, que fue cerrada incluso a los colonos del lugar alrededor de las cinco de la tarde, porque el equipo de efectos especiales realizaría algunas pruebas.
Faltando diez minutos para las 16 horas, los 200 extras comenzaron a salir de la locación, aún caracterizados como calaveras de Posada, para dirigirse a la calle 5 de Febrero donde ya los esperaban seis camiones de RTP, en los cuales partieron con rumbo desconocido.
Mientras tanto por la entrada principal una camioneta negra ya esperaba a la actriz mexicana Stephanie Sigman, que salió caminando de hotel portando un vestido morado y el cabello suelto y ondulado. Cuando ella subía al vehículo, Daniel Craig salió en otro igual del estacionamiento del hotel evitando así ser visto y fotografiado, delante de su transporte dos motocicletas de Seguridad Pública le iban abriendo paso entre el tráfico que se generó sobre 16 de Septiembre por el rodaje. De esta forma el 007 hizo su graciosa huida, dejando a curiosos y medios de comunicación, con las ganas de obtener una imagen de él.
cvtp