Lubezki, por el Oscar consecutivo en fotografía
Estudió en el CUEC, de la UNAM. (Foto: ARCHIVO EL UNIVERSAL )
cesar.huerta@eluniversal.com.mx
Podría decirse que Emmanuel El Chivo Lubezki no ha disfrutado del todo su Oscar obtenido el año pasado por Gravedad.
Hace casi 12 meses, apenas y se tomó unas horas para abandonar el rodaje de Los últimos días en el desierto, acudir a la ceremonia y minutos después y volver de regreso al set.
Luego se metió a afinar los detalles de Birdman, de Alejandro González Iñárritu; siguió un nuevo proyecto de Terrence Malick y, tras breves días, inició la preparación de The revenant, en Canadá, donde se encuentra por ahora.
“Se la pasa trabajando”, dice su hermano, el también director Alejandro Lubezki.
Ahora está a un paso de hacer historia en el mundo fílmico, si es que la Academia Americana le otorga hoy su segundo Oscar consecutivo gracias a sus planos secuencias de 15 y 10 minutos continuos para Birdman.
En una entrevista reciente, este ex estudiante del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC-UNAM) reveló que cuando El Negro Iñárritu lo invitó a subirse a la aventura, sintió miedo por ser una cinta que pareciera hecha con una sola toma.
“Espero no tener que hacer esto porque era un reto tan grande y no quería que estuviera llena de efectos”, contó.
Para su fortuna, dijo, no encontraron durante la búsqueda de locaciones un teatro que diera las condiciones físicas para una toma 100% continua como se requería.
“Tuve suerte de que no pudimos encontrar un teatro para hacer todos los pasillos y los camerinos que funcionara —dijo—. Y por ello tuvimos que cortar”, indicó el creativo.
A sus 50 años y siete nominaciones al Oscar, Lubezki es de los directores de fotografía más reconocidos en el orbe.
Ha trabajado, entre otros, con los realizadores Tim Burton (La leyenda del jinete sin cabeza), los hermanos Coen (Quémese después de leerse) y Michael Mann (Ali).
Birdman fue filmada en un set laberíntico y en el Teatro St. James de Broadway en Nueva York, EU.
“Fue como un ballet, eso es lo que lo hizo realmente emocionante”, comentó a fin de año.
Esa vez compartió que el mayor reto fue trabajar con las luces.
“Por ejemplo, la luz que iluminaba a Michael (Keaton) en el espejo de su camerino crearía una sombra un minuto después si nos movíamos alrededor de la habitación, así que tuvimos que medir todos los cambios de iluminación posibles ahí”. explicó Lubeski.