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José Manuel Aguilera afirma que está orgulloso de los 20 años de trayectoria artística de la banda La Barranca, pero aclara que no está satisfecho, ya que si lo estuviera dejaría de crear nuevos sonidos.

“No soy muy dado a voltear hacia atrás con mi propio trabajo, me importa lo que haré mañana. No queremos nostalgia sino demostrar una actividad ininterrumpida”, comentó.

Siguiendo con la búsqueda artística que los ha caracterizado y un oficio que han desarrollado tienen más cuidado en sus temas.

“Conforme avanzas muchos de los temas ya los dijiste y aunque siempre se habla de lo mismo hay que buscar nuevas formas para no repetirte”.

Aguilera sabe que las modas van y vienen, por lo que han sabido adaptarse y sobrevivir en la escena independiente utilizando las nuevas herramientas tecnológicas, sin olvidar que la música no sólo se trata de eso.

“No tenemos que preocuparnos si la música desaparece o no, es un temor infundado. Estamos en un punto de redifiniciones de cosas que quién sabe si van a servir o se quedarán y el reto es atravesar por esas tempestades mediáticas sin que determinen tu trabajo”.

Su espectáculo llamado El fuego de la memoria pisará el Teatro de la Ciudad el 22 de mayo en un proyecto que toma su nombre de los títulos del primero y más reciente álbum: El fuego de la noche (1996) y Eclipse de memoria (2013).

Este proyecto, que tendrá invitados especiales, incluye la reedición de su disco debut en vinil y la grabación del soundtrack que hicieron junto a la Cineteca Nacional del filme El Fantasma de la Ópera.