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Con la conducción de René Franco se llevó a cabo en la Sala Telefónica del Centro Cultural Roberto Cantoral la Bohemia 20 con los talentos de Sergio Esquivel, Mario Pintor y Felicia Garza, quien más se llevó la atención por ser una de sus primeras presentaciones después de su cambio de género.

“Siempre quise poder presentarme como lo que realmente soy, siempre fui y nací. Ahora que salí como Felicia Garza también me encontré con el silencio de mis hijas y ése es el precio que hay que pagar por ser una misma; no todo es dulzura y miel sobre hojuelas”, dijo Felicia, quien hasta el año pasado era Felipe Gil y que se sometió a un cambio de género.

“He recibido el cariño de mucha gente por mi valor y fortaleza de salir y lo seguiré haciendo porque estoy pavimentando un camino para otros. Si damos la imagen de dignidad y respeto nos van a querer, si no nos van a despreciar”, expresó Felicia tras un momento difícil y con su segundo cambio de vestuario en el que incluyó un vestido negro, peluca y sombrero.

“Este es un parteaguas para mí, dejé atrás a Felipe Gil y me inicio ahora con una discografía que conocerán próximamente.

“Soy una mujer transgénero, nací así porque no es que te hagas; muchas veces ante la ignorancia e intolerancia uno sufre, pero quise remediarlo ganando el cariño de mis padres porque durante años esto se consideraba un pecado; tan es así que podías perder la vida por eso. En la salud mental se consideraba como un desorden o enfermedad y hoy cambian las cosas porque son ustedes lo que están cambiando, todos tenemos el derecho de ser felices. Ahora vivo mi vida feliz como Felicia Garza”.

Antes de subir al escenario a Gualberto Castro para interpretar “Hasta que vuelva”, Felicia contó: “Dicen que la gratitud es la memoria del corazón y yo tengo buena memoria con este señor que cantó esta canción”.

El que fuera el primer éxito del grupo Límite, “Yo sin tu amor”, fue acompañada por aplausos mientras Felicia le daba voz y movía su cuerpo.

“Esta canción la escribí en una servilleta tratando de componer mi matrimonio con mi mujer y tres hijas. No lo logré, pero al menos gané el OTI”, expresó Garza, quien llevaba puesto pantalón y una brillante blusa, antes de “Lo que pasó pasó”, la cual le sacó algunas lágrimas. “Por segunda ocasión las perdí”, dijo al recordar a sus hijas que no le hablan más después de su decisión de dejar de ser Felipe Gil. El concierto duró cerca de dos horas.