La familia de Whitney Houston demostró anoche su oposición a la película biográfica de la cantante, al no acudir a la avant premiere de la película, realizada cerca del hotel en que falleció hace casi tres años.

“Fue la opción y la decisión de la familia por lo que quieren hacer por cualquiera que sean sus deseos y sus planes para no estar involucrados con esto”, dijo la directora de Whitney, Angela Bassett.

“Pero no tenían nada negativo qué decir sobre la película”, dijo Bassett. “A veces no decir nada es el mejor regalo”.

La familia no se presentó, pero colegas y amigos de Houston llegaron al estreno que se realizó en el Paley Center for MMedia, a calles del hotel Beverly Hilton donde Houston falleció ahogada a los 48 años, en febrero de 2012.

Su autopsia señalaba una enfermedad cardiaca y el consumo de cocaína como factores que contribuyeron a la muerte de la intérpete.

Los invitados que conocían a Houston incluían a Magic Johnson, el productor musical David Foster y los músicos Smokey Robinson y Sheila E. Bassett, nominada al Oscar como Mejor Actriz en 1994 por Whats love got to do with it.

Bassett debuta como directora de largometrajes con la cinta biográfica, que se estrena el 17 de enero en el canal Lifetime.

Bassett y Houston trabajaron estrechamente durante la producción y promoción de la película de 1994 Waiting to exhale y Bassett tenía buenos recuerdos de su compañera de elenco.

“Tener la experiencia de estar cerca de ella. Todo eso me sirvió para hacer esto”, aseguró. Sin embargo, al no tener la aprobación de la familia, la productora de Whitney no tuvo autorización para las grabaciones originales de Houston.

Para lograr algo parecido a la voz de Whitney, Bassett contrató a la cantante Deborah Cox, compañera, colaboradora y amiga de Houdson. AP