La actriz mexicana Salma Hayek estuvo a punto de sufrir un "accidente" debido a sus curvas.

Durante una sesión fotográfica en Los Ángeles, el pasado viernes, Salma portó un vestido negro strapless con el que batalló para mantenerlo en su lugar.

Hayek posó en una piscina y al salir tuvo que sostener el vestido a la altura del escote para evitar que sus senos quedaran al descubierto debido a la acción del agua en la prenda.

Además del vestido, Salma portaba aretes, un anillo y brazalete. Al salir del agua mostró el maquillaje en su rostro, intacto.

El pasado abril, en una entrevista para una publicación, la actriz de 48 años declaró que no piensa en las cirugías estéticas para mantener su imagen y que, incluso, nunca se ha hecho un peeling.

Salma llamó la atención el año pasado cuando al filmar una película en Malibú, el viento le levanto la falda y se pudo ver su trasero.

cvtp