La soprano Renée Fleming fue la encargada de interpretar el Himno Nacional de Estados Unidos en el Super Bowl XLVIII, con lo que se convirtió así en la primera estrella de la ópera en hacerlo.

La ganadora del Grammy en cuatro ocasiones se presentó antes del partido entre los Broncos de Denver y los Seahawks de Seattle, en el estadio MetLife en East Rutherford, de Nueva Jersey.

Conocida como la "Diva del Pueblo" , la soprano está estrechamente identificada con la región de la ciudad de Nueva York tras haber cantado durante años en escenarios emblemáticos como el Lincoln Center y el Carnegie Hall. En 2003 interpretó el himno antes del segundo juego de la Serie Mundial de 2003 en el Yankee Stadium.

Minutos antes la cantante Queen Latifah interpretó el tema "America the beautiful".

*Con información de EFE