La idea de participar de un docu-reality suele entusiasmar a ignotos con muchas ganas de ser famosos y, en menor medida, a famosos ansiosos por recuperar algo del lustre que alguna vez supieron ostentar.

Pues bien, apunten a Lindsay Lohan dentro de esa segunda categoría, porque este domingo debutará con su propio show televisivo de la mano de la siempre sagaz Oprah Winfrey.

Lindsay retrará el intento de la actriz por comenzar "una nueva vida" en Nueva York, lejos de las adicciones que la convirtieron en una suerte de caricatura de la simpática adolescente que supo ser.

Dirigida por la documentalista Amy Rice, el programa se revelará en ocho episodios que no navegarán por aguas calmas, precisamente.

Asistentes, sus padres, amigos y hasta un "coach de sobriedad" -quien debe asegurarse de que la muchacha se mantenga alejada del alcohol y las drogas- son algunos de los coprotagonistas del reality que tiene todo para ser un éxito.

"¿Te sientes una prisionera?", se escucha que le preguntan en un momento. Lindsay no duda: "Sí, todo el tiempo".

Sin embargo, lo más fuerte del trailer es una entrevista que Lindsay mantiene con Oprah -productora y dueña del canal en el que se emitirá la serie-, en la que la conductora le dice que tiene "que cortar con toda esa mierda" para poder estar sana.

jlc