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Si algo tiene Kevin Spacey es que es un gran contador de historias y que, a diferencia de su personaje Francis Underwood, no tiene temor a mostrar sus debilidades.

Vestido con un saco negro y camisa gris, habla con EL UNIVERSAL en el Hotel Regency de Park Avenue.

El protagonista de House of cards, que estrena su segunda temporada este viernes, habla del por qué cree que la serie que muestra el corrupto mundo de la política americana le gusta tanto a la gente.

"Creo que en lo que la serie ahonda es en la naturaleza humana. Y creo que a la audiencia le interesa verla porque saben que de eso de trata. La gente hace buenas cosas, malas cosas y está motivada por necesidades egoístas. Otros por ideas altruistas, somos un canvas de esa humanidad", dijo el actor que también recordó al creador de la serie, David Fincher, quien estaba interesado en explorar qué tan oscuro es el lugar del poder, según explicó.

"Y sí, es oscuro, pero espero que no pierdan el sentido del humor al verla", añádió el actor que en todo momento recalcó que su principal trabajo con personajes como Francis Underwood ha sido no etiquetarlo ni juzgarlo.

También reconoció que tratar un tema como el del poder siempre es interesante, pues es una posición que él mismo disfruta.

"Lo más importante con el poder es cómo y para qué lo utilizan las personas. Por ejemplo, yo sé que tengo una posición de poder como director artístico de teatro. Y que mi trabajo realmente es ser un facilitador y traer todos los elementos necesarios a la mesa para hacer posibles las historias. Para mí es una experiencia maravillosa poder darle vida a las ideas y llegar a la noche del estreno y ver cómo todos los elementos se han juntado y creado algo. Para mí esa es una forma increíble de utilizar una posición de autoridad y poder", expresó.

Sobre lo que le gustaría para el futuro, Spacey no duda un segundo en decir que llegar a grabar más de 37 temporadas de House of Cards.

"Mira, así está la cosa, muchas series siguen por más tiempo de lo que dura el entretenimiento, otras terminan antes. A mí me gustaría cerrar cuando el show esté en un punto muy alto. Mientras yo y David Fincher sintamos que aún hay historias por contar, podremos seguir adelante", aseguró.

Si los niveles de audiencia (que ni Netflix revela) siguen siendo tan buenos como el mismo productor insinúa, habrá serie para largo... "Creo que la forma de medir los ratings hasta el momento está a punto de extinguirse, ¿realmente creen que 25 mil cajas puestas en televisiones representen a 500 mil personas a lo largo del país? Algún día se sabrán los números reales y cambiará por completo el mundo de la publicidad".