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Fueron ocho años fuera de la música y su regreso lo ha reencontrado con las raíces de su país, mismas que lo llevaron a ser el mayor ganador de los premios Grammy Latino del año pasado en una industria que para Carlos Vives no ha sido fácil.

“Hemos tenido siempre el cariño de la gente, pero no ha sido fácil dentro de la industria posicionar nuestra música porque no responde a ninguno de los patrones convencionales que hay”, comentó a EL UNIVERSAL.

“Tomé este camino y sabía que no era fácil por no hacer lo que ya se estaba haciendo; nunca hemos esperado premios, fama o acceder a grandes escenarios porque tomamos el camino más difícil que fue reinventarnos dentro de la colombianeidad”.

Es esa misma razón la que, considera, lo ha alejado de los conciertos en México porque aunque lleva más de 20 años visitando nuestro país no ha tenido la oportunidad de hacer un show completo. Ahora espera conseguirlo y seguir abriéndose puertas.

“Como sudamericano siempre recibimos de México tantas cosas que nos marcaron en el cine, la música y la televisión. Cuando vengo más que pensar si voy a triunfar, pienso en disfrutar”, contó Vives, quien confesó que colecciona productos de “Cantinflas”.

A pesar de los cambios que le han tocado siente como si estuviera comenzando de nuevo por la posibilidad de reinventarse. Eso aprendió de la época en la que se retiró.

“Me tomaron por sorpresa muchos cambios. Al principio no entendía por qué la compañía con la que había trabajado tantos años desaparecía o ya no estaban interesados en Carlos Vives. En un momento en donde no éramos reconocidos nos obligamos a invertir en nuestros discos, en la calidad de los estudios, era costoso para ese momento y creo que haber hecho ese esfuerzo fue muy importante”, expresó.

Hace un año regresó a la música. En ese lapso ha realizado lo que nunca en su carrera. Y es que con su particular mezcla de géneros editó el disco Corazón profundo que resultó tan exitoso que le hizo producir uno más, titulado Más + Corazón Profundo, en donde colaboran ChocQuibTown y Marc Anthony. “Con Marc nos mandábamos mutuamente canciones durante muchos años y empecé a escribir cosas buscando acercarme a la música de él para que estuviera cómodo.

“Nos reunimos y lo que escogió fue una canción muy a mi estilo, pero cuando terminamos la grabación decidí convertirla en los dos estilos empezando a lo Vives y terminando como Marc”.

Ahora piensa en cantarle a las esencias de su nación así como resaltar una campaña de inclusión indígena, hecho que lo convirtió en embajador de la Agencia Internacional de Desarrollo de Estados Unidos.

“Mi trabajo siempre tuvo una búsqueda, el afán de mostrar cosas que tenemos allí y descubrir la familiaridad con la música del mundo para traer a estos tiempos nuestra música tradicional. Un país como Colombia, que busca la paz afanosamente, tiene que pensar en la inclusión de nuestras culturas indígenas olvidadas de las cuales desde el primer disco hasta el último nos hemos sentido orgullosos”, contó el colombiano.