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Sin credos ni religión, tan sólo una puesta en escena emotiva y llena de amor, eso es Godspell en cada uno de sus elementos, desde la escenografía hasta la música, que es el marco para este viaje espiritual que inicia el fin de semana en el nuevo Teatro Milán.

Primera escena, la Torre de Babel con los pensadores más importantes de todos los tiempos, como Sócrates, Tomás de Aquino, Edward Gibbon, entre otros, defendiendo su postura ideológica, primera muestra del camino que seguirá Godspell.

“El punto de vista que Lorena Masa (directora de la obra) tomó como base para montar Godspell en México es que de alguna manera estuviera presente la inclusividad religiosa, que todas las creencias espirituales estuvieran presentes sobre el escenario”, dijo Guillermo Wiechers, productor.

El espectador podrá observar esta diversidad de inmediato, gracias al mural (estilo wynwood walls) en el que símbolos como el Dalai Lama, el 'Che' Guevara e incluso el propio Jesucristo dominan la vista.

“Cada uno de los elementos escenográficos que van incorporándose a Godspell hace alusión a distintas culturas”, dijo Wiechers.

Juan Torres, también productor , señaló que entre los cambios que se hicieron en Godspell, la música tuvo especial atención. “Tiene nuevos arreglos, todas las melodías son distintas, nadie va a cantar lo mismo que ha cantado de Godspell, porque es una nueva traducción de Enrique Arce”.

“Es una obra muy sólida, es un bloque unificado, tanto la música, las coreografías, las parábolas, todo lo que está sucediendo en el escenario es diferente”, dijo Oscar Schwebel, integrante del grupo OV y protagonista de la puesta en escena.

Para Ana Victoria, la buena energía que rodea a este proyecto se siente por todos lados.

“Estamos muy conectados, creo que realmente tenemos un cariño bonito entre nosotros y se ha desarrollado una amistad hermosa que provoca que nos cuidemos, nos ayudemos, que tratemos de mejorar, se ha vuelto une hermandad hermosa”.

José Ron, quien lleva una carga importante en escena al dar vida a Jesús, declaró que la obra ya necesita de la participación del público. “Ya quiero que inicie, que la gente llene la sala y se lleve un mensaje positivo, que salga feliz, alegre, porque esta obra es energía, es un gozo en el corazón maravilloso”, expresó.