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El premio que ganó Emmanuel “El Chivo” Lubezki la noche del sábado por parte de la Sociedad Americana de Cinefotógrafos por su trabajo en Gravedad, no lo hace, necesariamente, candidato firme para obtener el Oscar, donde también está nominado.

El pasado juega en su contra: solamente tres (Quisiera ser millonario, Memorias de una geisha y Petróleo sangriendo), de los últimos diez ganadores del ASC Award, han repetido con la codiciada estatuilla hollywoodense que ahora se entregará en marzo.

Y él mismo lo ha experimentado: ganó el premio de sus colegas en 2007 por Niños del hombre y en 2012, por El árbol de la vida, pero en ambos se quedó un paso atrás del Oscar.

Ahora deberá borrar esos fantasmas, a los cuales se agrega el hecho de haber estado nominado por el premio de la Academia en cinco ocasiones, sin salir avante en alguna de ellas.

El sábado ya dio el primer paso, al superar los trabajos de El gran maestro y Nebraska, contra los que también competirá en el Teatro Dolby el mes próximo.

Al momento de recibir el premio, “El Chivo” compartió lo que llamó “honor” con el reparto y equipo creativo de Gravedad.

Agradeció al también cineasta mexicano Alfonso Cuarón y a sus socios de las compañías de efectos VFX, BM y al ejecutivo Chris DeFaria, para hacer una película.

“Quienes me ayudaron a poner, juntos, la cinematografía virtual del filme”, expresó.

Para contar esta historia sobre una astronauta (Sandra Bullock) tratando de regresar a la Tierra tras un accidente de su nave, Lubezki y Cuarón diseñaron un cubo para proyectar imágenes para que los actores tuvieran referencia.

Emplearon grúas usadas por las armadoras de autos para manejar las cámaras y diseñaron la animación necesaria para darle mayor efectividad a los reflejos y movimientos.

Hasta el momento, Lubezki lleva 14 premios alrededor del mundo por Gravedad, entre ellos el Camerimage, el más importante de Europa; el de los Críticos de Los Ángeles y el Australian Film Institute. En dos semanas, el mexicano peleará por el premio BAFTA inglés.