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NUEVA YORK.— Un respiro. Eso es lo que Alejandro González Iñárritu se dio con Birdman, su nuevo filme de humor negro que presentará en el Festival Internacional de Cine en Morelia que comienza la próxima semana.

“Es una comedia negra, la verdad es que tampoco iba a hacer una comedia de Disney. Y tiene momentos duros y el personaje pasa por situaciones difíciles pero evidentemente a comparación de las otras cosas que he hecho sí es un respiro deliberado. Es divertido. Yo no sabía que se podía reír en un set”.

El filme, fotografiado con Emmanuel Lubezki, es protagonizado por Michael Keaton y Naomi Watts.

“A 'El Chivo' lo conozco hace 20 años, habíamos hecho comerciales juntos y un cortometraje pero nunca una película y se dio la oportunidad porque Rodrigo Prieto estaba trabajando con Martin Scorsese, así que entre el momento y las ganas de trabajar juntos que teníamos fue que se dio esta feliz coincidencia. Lo que brinda 'El Chivo' es invaluable, yo creo que es de las personas más excepcionales de mi generación, pues es un visionario, un artista que aporta mucho a la estética”.

En la película, el realizador de Amores perros y Biutiful cuenta la historia de un actor famoso por dar vida a un superhéroe que planea montar una obra en Broadway y una noche antes trata de recuperar a su familia.

“Todo empezó a partir de un cuento de un escritor americano que me gusta mucho, John Cheever. Tiene un relato que me intrigó bastante acerca de un tipo que está encerrado en un cuarto de hotel hablando por teléfono y en esa llamada, sin saber lo que le dicen los otros personajes, vas recopilando toda su vida, la complejidad de su relación con su hija, la esposa que ha tenido un brote psicótico, etcétera”, comentó el cineasta, quien actualmente filma The Revenant, con Leonardo DiCaprio.