Gustavo Rojo, 70 años de trayectoria artística
SATISFECHO. Admite que no es el actor más conocido del mundo, pero sí es respetado y ha podido vivir de su profesión. (Foto: Archivo )
Una carrera de éxito, aderezada con el amor de su familia, es como describe Gustavo Rojo 70 años de trayectoria artística, de la que asegura que "sigo escribiendo esta gran historia, porque aún no estoy retirado" .
Hace apenas unas semanas el primer actor se regocijó con el homenaje que le rindieron por su labor artística, en la que se ha desarrollado en cine, teatro y televisión con gran pasión, la misma que le ha transmitido a su hija, la también actriz Ana Patricia Rojo.
"Doy gracias por ese cariño con el que me ha cobijado mi público. Cuántos recuerdos tengo, mi primera película ‘Murallas de pasión' la hice en Acapulco, la primera en inglés y fue en ésta donde unos ejecutivos de la Metro-Goldwyn Mayer me vieron y me contrataron; estuve dos años con ellos" , señaló el actor.
Rojo, quien las nuevas generaciones lo ubican por sus participaciones en melodramas como "Qué pobres tan ricos" y "Abismo de pasión" , ha tenido la fortuna de trabajar con gente de renombre como el cineasta Luis Buñuel, quien lo dirigió "En el gran calavera" , y actores como Johnny Weissmüller, en "Tarzán y las sirenas" (1948) , y Sean Connery, por mencionar algunos.
"Luis Buñuel era una persona con un gran sentido del humor, además de que fue un gran amigo de mi familia. Mi madre Mercedes Pinto fue escritora e hizo " Él ", texto que fue llevado a la pantalla grande y se convirtió en un clásico del cine español" , comentó.
"Hice más de 100 películas y trabajé con los actores más importantes. En México compartí con grandes como Fernando y Andrés Soler, así como Sara García, quien me quería como si fuera verdaderamente mi abuelita y se sentía mi hada madrina, porque yo hice mi segunda película con ella" , expresó el eterno galán de cine.
Aseguró que su trayectoria "es una gran historia que escribo aún, porque no estoy retirado" .
Enfatizó que también se desarrolló en Alemania, razón por la cual en ese país ya existe una biografía sobre su carrera.
Pero en su opinión, a esa historia le hace falta el dato personal, el de su familia, que sin ella no concibe la felicidad. "Yo haré mi biografía contando esas anécdotas" .
"Me casé con una actriz alemana y me convenció de que nos fuéramos a Europa, ya que en Hollywood podía hacer cosas después, y la verdad es que no me arrepiento de mis decisiones, he estado donde he querido y me han llamado" , explicó.
"Si no soy el actor más conocido del mundo, sí puedo decir que soy respetado y que he podido vivir de mi profesión" , añadió Rojo, quien nació sobre el Océano Atlántico, en el barco alemán "Cretel" .
"Mi madre escribió un artículo que no gustó al gobierno español y se corrió el rumor de que la invitarían a abandonar el país y por ello salieron del país, yo ya venía en camino" , dijo el actor, cuyos hermanos son Rubén, Pituka, Ana María y Juan Francisco.
Destacó que gracias a las relaciones que tenía su madre en Sudamérica, tomaron la decisión de viajar en dicho barco, que salió de Lisboa con destino a Montevideo.
"Nací en aguas internacionales, podría haber adquirido la nacionalidad alemana, pero mis padres decidieron esperarse y registrarme en Uruguay. Así comenzó mi vida, donde hoy doy gracias por todo" , comentó el primer actor, considerado uno de los galanes preferidos del cine nacional, género en el que conquistó a bellezas como Silvia Pinal, con quien tuvo una relación sentimental.
El artista se casó por primera vez con la actriz española Mercedes Castellanos, fallecida en 1954. Procrearon una hija, Alejandra, quien está casada, tiene tres hijos y reside en España.
Por segunda ocasión contrajo matrimonio con la actriz austriaca Erika Remberg, de quien se divorció.
Rojo, quien se siente afortunado en el amor, volvió a encontrarlo, por tercera vez, ahora con su actual esposa Carmela Stein, quien fue Miss Perú. Con ella procreó dos hijos, Enrique y Ana Patricia, esta última siguió sus pasos en la actuación.
Ana Patricia describe a Gustavo como un padre consentidor, "y un gran ser humano. Si es que hay otra vida, tendré que hacer algo muy bueno para que él vuelva a ser mi papá" .
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