Aunque se sabía que Charlie Sheen pasó Navidad y Año Nuevo en Cabo San Lucas, pocos detalles de su estancia en México se dieron a conocer entonces.

El sitio web Radar Online publica ahora más información de la estancia "fuera de control" que el actor pasó en nuestro país, y que incluyeron alcohol, medicinas de prescripción y pedir a hombres que lo besaran.

Poco después de su llegada, Sheen solicitó a un tatuador y éste llegó con sus amigos a la suite del actor en un hotel de cinco estrellas.

"Charlie está de pie junto a una mesa... en la mesa hay botellas de vodka, cigarrillos por todas partes, un puñado de Vicodin... él toma unas y las pasa con vodka", detalló una de las personas que acudió a la habitación.

Mientras le realizaban el tatuaje a Sheen éste tomó más Vicodin y de pronto golpeó la pared y le dejó un agujero. "Después firmó debajo del hoyo".

 Tomada de Radar Online

Para los asistentes era claro que Sheen estaba mal, pues incluso después se quitó los pantalones y quedó en boxers.

Aunque su guardaespaldas le pidió que no lo hiciera, Sheen quemó sus pantalones.

La jornada no terminó ahí, pues pese a que Charlie iba acompañado por su novia, Brett Rossi, le pidió a uno de los hombres que lo besara e incluso ofreció hasta diez mil dólares por que lo hiciera.

El actor pidió al equipo que le realizara otro tatuaje, una simulación de la pulsera que le habían regalado sus hijas.

cvtp