La cantante Mariah Carey acaba de ser demandanda por una ex asesora del hogar que le prestó servicios desde marzo de 2007 hasta junio de 2014, tiempo en que, según afirma, habría sido explotada laboralmente por la diva.

La mujer, identificada como Ylser Oliver, asegura que Carey la hacía trabajar hasta 16 horas diarias y no la dejaba descansar ni para comer. Además, dice que no recibía pago alguno por sus horas extras. Según consta en la demanda, Oliver estaba a cargo de la casa de la artista ubicada en el barrio de Tribeca, en Nueva York, pero además le preparaba las maletas antes de cada viaje y tenía que atender todas sus "necesidades personales" que incluían contestar su teléfono y "cuidar" a sus amigos y familiares.

"Mi cliente puso a su propia familia en un segundo plano para ocuparse de la de Mariah, y ella le ha devuelto el favor no pagándole lo que le debía. Mi cliente es una mujer muy trabajadora que trató a Mariah y a su familia como si fueran la suya propia, trabajando a todas horas de la noche y del día", aseguró Matthew Blit, abogado de la ex empleada, al New York Post.

La portavoz de la cantante, Cindi Berger, señaló al respecto que "no puedo comentar nada sobre algo de lo que no tengo conocimiento, y no nos ha llegado ninguna noticia sobre dicha demanda".

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