La reina de las fiestas de Halloween en Estados Unidos, Heidi Klum, se llevó los reflectores al disfrazarse de si misma, pero en el futuro lejano.

Alejada de los atuendos "sexy" que muchas celebridades visten para el día de brujas, la modelo alemana se atavió de un elegante traje de dos piezas, arrugas, canas, manchas seniles y hasta varices para sorprender a sus invitados.

Ésta no es la primera vez que Heidi se corona como la mejor disfrazada, lo cual no es una casualidad, según le dijo a la prevista Parade. "Empiezo a pensar en ideas de disfraces varios meses antes de Halloween", quien admitió que un disgraz le lleva meses de preparación.

Klum llegó sola a su fiesta, la primera que ofrece tras su separación del cantante Seal, pues el año pasado tuvo que suspender el evento debido al clima.

Los atuendos de la presentadora de un reality de modelos siempre sorprenden, al "desprenderse" de la piel en 2011, o al disfrazarse como un miembro más del Planeta de los Simios junto a su ex marido Seal.

cg