Con 28 años, la cantante y conductora Kelly Osbourne tiene en su haber siete estancias en rehabilitación y en dos instituciones mentales.

La hija del rockero Ozzy Osbourne habló a la revista Cosmopolitan Reino Unido sobre su pasado de drogas.

Kelly destacó el apoyo que siempre tuvo de su madre, Sharon. "Mi mama incluso me llevó a una habitación de manicomio para asustarme, pero sólo me senté hasta que dijo 'bien, esto no va a funcionar'", relató.

Sin embargo, Kelly logró recuperarse y también hacerse cargo de su madre cuando libró una batalla contra el cáncer y con su padre, cuando tuvo un accidente. "Él no se podía mover del cuello para abajo, así que dormí en el piso junto a su cama por cuatro meses. Le cepillaba los dientes y lavaba si ropa, y todos los días nos poníamos el traje de baño y lo bañaba", explicó.

En la familia Osbourne no es nueva la lucha contra las adicciones. Ozzy abusó del alcohol y las drogas durante 20 años. Su hijo, Jack Osbourne, fue tratada por el abuso de sustancias a los 17 años y la primera vez de Kelly en rehabilitación fue a los 19 años.

cvtp