Se 'sueltan' la correa
ROBIN THICKE Y MILEY CYRUS. Sorprendieron en los MTV. (Foto: ARCHIVO EL UNIVERSAL )
erika.monroy@eluniversal.com.mx
Y de pronto el perreo dejó de ser exclusivo del reggaetón y se colocó en los principales escenarios de la música pop internacional. De la mano de Miley Cyrus, el baile desató controversia, y así como encontró detractores también hubieron quienes descubrieron el potencial de este baile que ha sido tachado de vulgar por los sectores conservadores.
Con su presentación en los MTV Video Music Awards, la Cyrus provocó que las búsquedas en internet sobre el perreo se incrementaran, los videos de aficionados haciendo gala de sus mejores “arrimones” crecieron y hasta hubo quien salió a la defensa del “buen perreo”, como la actriz Sofía Vergara quien, a través de su Twitter, buscó ilustrar las buenas formas del baile que, según ella, se inventó en Colombia.
Para Roberto Mitsuko, ex bailarín y juez de concursos televisivos de baile, la razón de que el perreo esté tan “caliente” es sólo porque es una novedad. “Lo que hizo Miley no fue el baile, fue algo sexual que hizo únicamente para sepultar su imagen de niña buena y tonta, si su presentación hubiera incluido algún buen paso de baile las cosas serían distintas”, comenta el también coreográfo vía telefónica.
“Este tipo de baile es un tanto vulgar, porque en el mismo nombre lleva lo que es la idea central del movimiento, ese momento en el que los perros copulan”, asegura.
Con el nombre de twerking en inglés, los angloparlantes definen esta palabra como: el acto de sacudir el trasero de un lado a otro, de arriba a abajo y en forma circular, bailar de una manera provocativa con la cadera y en una postura en cuclillas, define el diccionario de Oxford.
El twerking ha ganado popularidad entre otras artistas y cantantes que han hecho gala del movimiento de sus caderas acompañadas de un hombre en el escenario. Aquella escena que protagonizarón Pitbull y Jennifer Lopez en 2011 en los American Music Awards encendió la pantalla unos minutos y le dio la vuelta al mundo. Ejemplos como Nicki Minaj son visitas obligadas en el canal de videos en internet.
Inclusive la rapera dijo que podía darle una clase a aquellas cantantes que quisieran intentar entrar al mundo de este baile, del que hizo gala en un clip junto a Justin Bieber.
“En Estados Unidos todo es copiable, si alguien logra posicionar algo, inmediatamente tiene réplica en los shows”, considera Mistuko. El twerking poco a poco se ha inflitrado en los espectáculos. Durante la premiación de los Teen Choice Awards, Darren Criss y Lena Hole se encargaron de organizar el twerking más grande del mundo.
Disfrazados de animales, los conductores trataron de poner en el escenario el ritmo para que el público se uniera al reto de bailar, pero no lo lograron y cortaron la transmición.
Ante la fiebre de este movimiento convulso, hay quienes no están de acuerdo con esta moda. Harry Styles, integrante de One Direction, expresó su postura después de ver el show de su colega en los MTV. “Creo que es muy inapropiado, especialmente para los grupos de edad a los que están dirigidos”, comentó durante la promoción de la película This is us.
“Creo que es, ya sabes, la promoción de la promiscuidad”, agregó el joven quien junto con sus compañeros de banda también han hecho este baile en alguna que otra presentación alrededor del mundo.
Demi Lovato hizo lo suyo al expresar en varios tuits su desagrado por este baile. “¿Puede el mundo parar de hablar del perreo? No empiecen con esa basura, es un término que debe de desaparecer”, escribió la cantante. Para Mitsuko la fiebre del twerking no es algo a largo plazo, será una novedad pasajera que sólo sobrevivirá en aquellos que lo sigan retomando. “Si son importantes, lo seguirán imitando”, considera.