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Apoyándose para recordar sus líneas y ensayando coreografías, es como los chicos de La CQ se preparan para lo que será la versión musical de la serie de televisión que se estrena hoy en el Teatro Aldama.

Gracias al éxito que el programa ha tenido, los productores se animaron a hacer esta versión, en donde los seguidores de las aventuras de Monche, Beto, Ángel, Clara, Jenny, Danny, Adri y Roque podrán vivir de cerca un día en La CQ.

“Esta era, en realidad, la idea original de la serie, que fuese musical, pero como nos tuvimos que ir a grabar a Venezuela y hacer varios cambios, el programa se convirtió en lo que ha sido, pero no quisimos quedarnos con las ganas”, dijo Adrián Sánchez, director de escena de la serie y ahora de la obra musical.

El elenco está listo con una escenografía al estilo cómic, en donde basta girar una pared para que el pasillo, el laboratorio y los salones de clase aparezcan. “Ha sido una sorpresa para todos lo que hemos conseguido con La CQ, a parte de que es mi bebé, porque yo lo creé, estamos muy felices por el reconocimiento que el trabajo de éstos chicos está logrando”, comentó Pedro Ortiz de Pinedo, productor y creador de la serie.

Para el reto en el escenario teatral, bailarines y protagonistas ya han preparado sus pasos de baile. “Serán varias coreografías en este capítulo, porque quisimos tener una trama completa en una sola función de hora y media”, comentó Sánchez.

Adrián Sánchez, “El Venado”, dijo: “Para ellos ha sido un reto nuevo, porque han tenido que aprender a cantar y bailar al mismo tiempo y aunque no son unos profesionales lo están haciendo muy bien”.

Por su parte, Ferny Graciano, quien interpreta a Danny, expresó: “La verdad es que está súper padre, porque podemos interactuar con el público; todos no hemos preparado mucho para este momento, así que estamos muy emocionados”.

Entre miradas traviesas que confiesan lo bien que se llevan, la química del elenco se demuestra en cada escena en donde tendrán que sobrevivir a la idea que tiene Roque, de llegar a sus 500 calzones chinos.

“Lo padre ha sido que los niños que nos ven pueden identificarse con nosotros, porque al final de cuenta vivimos una etapa que ellos pronto vivirán, la de la secundaria”, dijo Harold Azuara, quien junto a sus compañeros comparte la idea de que el talento de su generación los ponen en buen camino.

Pese al éxito obtenido, Pedro Ortiz de Pinedo sabe que una segunda temporada con el elenco original no es una opción: “La idea es ser lo más real posible, estos chicos ya crecieron y no sería coherente forzar una segunda temporada con ellos, cuando lo mejor ha sido la naturalidad de la serie”.