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Marco Pérez no creció con la cultura de escuchar a Gloria Trevi y sus canciones; es más, el controvertido calendario que sacó la regiomontana en 1992, no le causó a sus 16 años, algo especial.

Ahora, el cine le ha requerido meterse a ese mundo para poder interpretar a Sergio Andrade, el compositor y productor quien consagró a la Trevi y que fue acusado de corrupción de menores, cargo del que fue absuelto, rapto y violación agravada.

EL UNIVERSAL presenta la primera imagen de Marco Pérez (Días de gracia) personificado para la cinta Gloria, actualmente en rodaje en el DF.

La producción recae en Matthías Erenbergh (Sexo, pudor y lágrimas) y Barrie Osborne (El señor de los anillos), entre otros.

El guión arranca cuando Trevi (Sofía Espinosa, La niña en la piedra) llega a hacer pruebas para ser la doble de Lucero.

“Enriquecí el trabajo con una buceada a los videos, la información, todo lo que se ha dicho, de esta intensa historia de amor, dolor, de música”, dice Marco.

Quien fuera el hermano de Gael García Bernal en Amores perros, habla en un receso.

¿A este Andrade se le verá calculador, frío, producto de toda esa fama que lo envolvió?

Y creo que aún más. Es un personaje que tiene una pasión inmensa hacia la música, una disciplina impresionante y apuesta a los genios.

Hay una anécdota de que este señor necesitaba trabajar más y en sus contratos estipulaba el tiempo que requería para meterse a fondo en la creación de sus obras musicales; esto se verá y por supuesto, romanticismo, amor por el amor.

¿Has debido subir de peso para el papel, tomando en cuenta los años en que transcurre el guión?

Hay una transformación padre. He permitido que haya una dejadez de mi cuerpo, para permitir que se aborden la primera y segunda parte de la historia. ¿Cuánto he subido?, no lo sé, sólo tengo la sensación.

Lo impactante es el proceso de caracterización que ha habido, un día llegué sin barba ¡y me colocaron una hiperrealista!

¿Qué tal Sofía como Trevi?

No soy alguien que le guste ver lo que hago, pero aquí he visto (en el monitor) a ella y ha sido un deleite, en las escenas que nos ha tocado compartir he percibido una apertura para hacer mancuerna creativa, como en su momento, creo, lo hicieron Gloria y el señor Andrade, quienes tuvieron una conexión que dio luz a un bebé musical que movió a tanta gente.

¿Cómo logra un actor estar ajeno a todo lo que se ha manejado en los últimos días, en el entorno legal de la película?

En el mundo en que vivimos, la apertura a los medios es impresionante; desde el celular se puede saber lo que está pasando, pero por amor al personaje, a este trabajo, a Gloria, me estoy enfrascando en la creación e intento no contaminarme de información.

Puedo decir que esta historia (la real) la tomo con mucho respeto porque es una historia intensa, todos sabemos que lo fue, que movió cosas en cuestiones legales, emocionales, personales, musicales, que hicieron sentir a tanta gente y eso es motivo para tomar este proyecto con seriedad.