Bynes, con signos de esquizofrénica
Video. Amanda Bynes es ingresada al psiquiatrico
espectaculos@eluniversal.com.mx
Amanda Bynes y Britney Spears tienen en común el código 5150, un tipo de detención expresado en la legislación de California, la cual implica que la persona puede ser detenida, contra su voluntad, por un periodo de 72 horas, para efectuar una evaluación psiquiátrica.
Este código le fue aplicado a Spears en 2008, por compartamiento errático que incluyó raparse la cabeza, exceso de drogas y varios incidentes que la llevaron al hospital a raíz de su divorcio con Kevin Federline.
La cantante tuvo que quedar en custodia de su padre James Spears, lo cual también podría suceder con Bynes. Y es que debido a su edad, sus padres no podían intervenir, pero con el nuevo incidente las cosas cambian y buscarán la custodia de la joven.
Los familiares deAmanda ya consideran la idea de que ella es incapaz de cuidarse y significa un peligro para los demás.
Después de su detención por intentar incendiar la casa de una vecina, Bynes ingresó a un centro psiquiátrico en donde se identificaron signos de esquizofrenia en la joven actriz de 27 años.
En abril de este año surgió una versión según la cual la actriz escuchaba voces y hablaba un lenguaje sin sentido, lo que podría significar los primeros inicios de su transtorno.
Esta enfermedad mental añadiría a la ex chica Nickelodeon a la lista de varios famosos con problemas mentales y no sólo eso, sino que su custodia podría ser delegada a sus padres, lo que implicaría resticciones tanto a sus libertad financiera como toma de decisiones.
Otros famosos que ha sufrido problemas mentales y han mermado su calidad de vida y obstaculizado su carrera artística. Megan Fox declaró hace unos años que tenía episodios de esquizofrenia en donde perdía el control.
Aunque esas declaraciones fueron hechas cuando aún admiraba a Marilyn Monroe, quien sufría de episodios de depresión y esquizofrenia, los cuales pudieron haberla llevado a su muerte en 1962.
Recientemente, Catherine Zeta-Jones entró a terapia para superar su bipolaridad que se disparó durante el cáncer de su esposo Michael Douglas y que en la que recayó a principios de este año.
Jim Carrey, en tanto, reconoció vivir depresión y agresión, síntomas del trastorno bipolar. Contó que hubo momentos que no hacía nada más que llorar.