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Adal Ramones dice que ya tuvo mucho de comedia, que con los 12 años que hizo Otro rollo fueron suficientes y que ahora es momento de hacer cosas distintas.

“Quiero ser algo más que el tipo de la gorrita y de los monólogos”, aseguró el regiomontano. “Me ha costado mucho decidirme si vuelvo a hacer el programa o no. He abusado de la paciencia de mis jefes, pero ahorita no necesito hacer más comedia, me siento a gusto haciendo otro tipo de géneros”, expresó.

Y aunque las solicitudes de los ejecutivos de Televisa para que el conductor vuelva con su programa, Ramones sabe que las condiciones de su regreso podrían no gustar a todos.

“Hace mucho recibí jalones de orejas, mi jefe me decía: ya estamos hartos de que seas el niño rebelde de Televisa, pero creo que si no están dispuestos a correr el riesgo, mejor ni me lo aprueben”, agregó.

El programa, que en el año 2007 saliera del aire, se caracterizó por la crítica y el humor que tanto gustó a los jóvenes, que por 12 años siguieron la emisión.

“La gente se moría de risa con los monólogos, pero destrozaban a los papás, a los políticos, a los artistas, así que si ellos me dejan hacer el programa que yo pienso, tendrán que dejarme ser crítico”, puntualizó.

Una tragedia real

Adal Ramones estrenará su primera película dramática como protagonista. “Es una tragedia, fue un personaje muy fuerte, porque tenía que lucir devastado y debía ser muy introspectivo”, explicó.

Y aunque reconoce que el público podría salir decepcionado porque no es una cinta de comedia, Ramones está convencido de que habrá quien sepa despojarse de esos prejuicios y disfrute de la película.

“No quería una película comercial, no quería un sketch vuelto película , aquí me encanta no poder reconocerme y eso es lo maravilloso”, explica. La cinta dirigida por Juan Carlos Carrasco se estrenará con 25 copias en México.