Los padres de Amanda Bynes están pidiendo la custodia de la actriz, algo que ella jamás habría deseado, pues su relación nunca fue cordial.

De acuerdo con Ana Rivera, una amiga de Bynes que ha hablado para Radar Online, en realidad Amanda nunca quiso ser actriz, pero sus padres la obligaron.

En 2010 ella anunció que se retiraba de la actuación para dedicarse a la moda y cuando le envió a su madre una imagen del vestido en el que trabajaba ella le hizo comentarios negativos.

Amanda "estaba frustrada, ellos querían que actuara pero ella ya no deseaba hacerlo. Dijo que la única película en la que le gustó estar fue Hairspray. No obtenía ningún placer en actuar", aseguró la amiga.

La misma persona dijo que Bynes parecía estar celosa de su hermana Jill, quien era elogiada por sus padres y era maestra, casada y con dos hijos.

Acerca de su padre, la actriz consideraba que era sobreprotector y evitaba estar en contacto con él o con su madre.

También trascendió el fin de semana que la joven estaba obsesionada con su peso e imagen, sobretodo desde que su madre le dijo que nunca había lucido mejor que cuando pesaba 45 kilos.

cvtp