CARACAS.— Alejandro Sanz se despidió de Venezuela denunciando que vio “mucho” miedo y amenaza, y dijo que “no se puede gobernar” bajo esas condiciones.

Al culminar su visita de siete días en ese país, donde ofreció tres conciertos, Sanz se despidió el lunes de sus seguidores venezolanos afirmando en su cuenta de Twitter que “no se puede gobernar desde el miedo y la amenaza, y de eso he visto mucho en Venezuela. Lo digo para los moderados de cualquier signo político”.

El cantautor español, quien en los últimos años mantuvo una polémica con el presidente Hugo Chávez, se abstuvo de mencionar de forma directa al mandatario y sólo indicó: “Creo sinceramente que los violentos están perdiendo la batalla. El socialismo moderado tiene su sitio en la democracia y es necesario en la sociedad moderna (igualdad de oportunidades) pero el socialismo arcaico y totalitario tiene los días contados igual que el fascismo”.

Sanz dijo que Venezuela “es un país maravilloso, tocado por la mano de Dios, con todos los recursos para ser una potencia en potencia, pero muy mal administrado”.

Moderados y radicales

También se refirió al movimiento político del mandatario venezolano y sostuvo que “dentro del chavismo hay gente moderada que cree en las políticas sociales y trata de mantener un equilibrio que es casi imposible de mantener porque dentro del chavismo existe una corriente radical y violenta que trata de acobardar al pueblo y a todo el que opine diferente”.

Sanz arribó a Venezuela el pasado 15 de noviembre en medio de gran hermetismo tras anunciar desde Las Vegas que no vendría al país a “provocar”, y sólo se limitó a emitir algunos comentarios a sus seguidores locales a través de Twitter.

En 2007, las autoridades locales suspendieron un concierto del cantante en Caracas, tras declararlo persona no grata porque años atrás declaró que no le gustaba Chávez. Un concierto que iba a ofrecer Sanz en febrero de 2008 en la capital venezolana fue cancelado por la empresa organizadora del evento alegando que no había “condiciones apropiadas” para el show.

El hecho fue considerado como una secuela de la medida que enfrentó el cantante algunos meses antes.

Chávez ha negado que su gobierno haya vetado al cantautor español y lo invitó dos años atrás a cantar en una plaza aledaña al palacio de gobierno. (AP)