Berlín.— Los equipos de investigación hallaron un video que muestra los últimos segundos dentro del vuelo de Germanwings que se estrelló la semana pasada en los Alpes franceses, revelaron ayer el diario alemán Bild y la revista francesa Paris Match.

Ayer mismo, Lufthansa, en cuya escuela de aviación se formó el copiloto que supuestamente estrelló a propósito la aeronave con 150 personas a bordo, admitió que sabía que Andreas Lubitz había sufrido una depresión que le llevó a interrumpir su formación.

El video, de cuya autenticidad el Bild dijo estar seguro, fue recuperado por una persona próxima a la investigación. Fue grabado desde la cola del avión, no se sabe si por un pasajero o por un miembro de la tripulación, y muestra una escena “caótica” en la que se oye gritar a los pasajeros “¡Dios mío!” en diversos idiomas.

También se escuchan al menos tres golpes metálicos, que podrían corresponderse, según el Bild, a los intentos del piloto de entrar en la cabina en la que estaba encerrado Lubitz.

Hacia el final de la grabación, apunta, parece que el aparato roza la montaña y se inclina hacia un lado; tras una sacudida más fuerte se vuelven a escuchar los gritos del pasaje y el video termina.

El diario no especifica cómo re recuperó la grabación del video, aunque publica una entrevista con un experto en teléfonos celulares que explica que pese a que el aparato se destruya se puede recuperar información de las tarjetas.

De acuerdo con versiones de medios, Lubitz padecía una depresión que podría estar detrás de su decisión de estrellar el avión.

Hasta ahora, Lufthansa, matriz de Germanwings, se había negado a revelar las causas que llevaron al joven alemán de 27 años a interrumpir durante medio año su formación como piloto que comenzó en 2008 en la escuela de la compañía en Bremen.

Pero ayer, la compañía informó que el copiloto informó al centro que había sufrido un “grave episodio depresivo que cedió”, en un e-mail fechado en 2009 relacionado con la reanudación de su formación.

“Finalmente el copiloto recibió la confirmación médica de que era apto para volar”, indicó Lufthansa, algo que ya había adelantado el presidente de la compañía, Carsten Spohr, al calificar al copiloto de “cien por cien apto para volar” y “sin ninguna limitación” después de ser sometido a una serie de test de aptitud y sicológicos.

Este intercambio de correos electrónicos forma parte de una serie de documentos adicionales entregados por la matriz de Germanwings a la fiscalía de Düsseldorf encargada de esclarecer lo sucedido y entre los que se encuentran documentos sobre la formación y el historial médico del copiloto que entró finalmente en la compañía en 2013.

La nueva información se suma a la facilitada el lunes por la fiscalía, que aseguró que Lubitz recibió tratamiento siquiátrico hace unos años por tendencias suicidas antes de comenzar su carrera como piloto.

Sin embargo, descartó que padeciera “enfermedad orgánica” alguna como apuntaban muchos medios después de que los investigadores informaran de que el copiloto estaba de baja médica el día del accidente y lo ocultó.

La recuperación de los cadáveres de los pasajeros del avión finalizó ayer, a una semana de la tragedia. Hoy se continuará con la recuperación de los objetos personales de las víctimas, además seguir con la búsqueda de la segunda caja negra. Para este fin de semana se espera que lleguen muchos de los familiares de las víctimas, toda vez que son días feriados en Alemania y España, de donde eran la mayoría de los fallecidos. Agencias