Optimismo en diálogo sobre Ucrania

DIÁLOGO. Los presidentes ruso, Vladimir Putin; francés, François Hollande; ucraniano, Petro Poroshenko, y la canciller alemana, Angela Merkel, durante una pausa en las pláticas de paz realizadas en Minsk. (Foto: VASILY FEDOSENKO / REUTERS )
Minsk.— En el marco de las aguardadas conversaciones celebradas ayer en Minsk para hallar una solución al conflicto en Ucrania, Moscú dejó entrever un primer gesto de confianza tras varias horas de negociaciones.
Las conversaciones, en las que participan la canciller alemana Angela Merkel y los presidentes de Francia, François Hollande; Ucrania, Petro Poroshenko; y Rusia, Vladimir Putin, son “activas”, aseguró el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, quien precisó inmediatamente que se desarrollan “más que bien”.
Cuando en Minsk ya era jueves, el asesor presidencial ucraniano Valeriy Chaly dijo en Facebook: “Tenemos otras 5 a 6 horas de trabajo. Al menos. Pero nosotros no deberíamos irnos sin un acuerdo sobre un cese del fuego incondicional”.
No obstante, no todos los presentes sumaron su voz a esta tendencia alentadora. Los separatistas prorrusos, cuyos líderes llegaron sorpresivamente a Minsk, advirtieron que “es imposible que se acuerde un cese del fuego total e inmediato en el frente”, según dijo, desde Donetsk, el portavoz separatista Andrei Purgin.
De momento no estaba claro cuál era el rol de los líderes separatistas Igor Plonitzki y Alexander Sajarchenko en los diálogos en la capital bielorrusa.
En caso de que las negociaciones resultaran exitosas, ambos estarían dispuestos a firmar un acuerdo, según explicó Purgin.
El portavoz rebelde señaló que para que haya un acuerdo sobre un cese el fuego haría falta al menos un día y medio, con lo cual abrió una ventana compartida por el representante de los separatistas ucranianos en el grupo de contacto, Denis Pushilin, quien comentó que si bien se han producido avances el giro hacia el cambio llevaría más tiempo, apuntó.
El encuentro de ayer ha sido considerado como clave para lograr un posible fin del conflicto, que ya se ha cobrado más de 5 mil 400 vidas en la región ucraniana de Donbás. Luego que los cuatro máximos representantes de Alemania, Rusia, Francia y Ucrania estuviesen reunidos durante unas dos horas, las conversaciones fueron ampliadas a un círculo mayor.
Tras otras dos horas de negociaciones, el grupo de debate pasó a estar integrado nuevamente por un círculo reducido, informó el portavoz del Kremlin Dmitri Peksov citado por la agencia Tass. Se esperaba que los mandatarios negociaran entre otros temas una tregua y el retiro de armas pesadas de la zona de guerra.
No descartan ley marcial
Si fracasan las conversaciones y se produjeran nuevos brotes de violencia en Donbás, Poroshenko dijo que no descarta declarar la ley marcial. Las conversaciones se vieron sin embargo ensombrecidas por nuevos hechos de violencia en el este de Ucrania. Durante el tiroteo a un hospital en el bastión de los separatistas Donetsk murió al menos una persona, informaron medios locales, y al menos ocho civiles resultaron heridos.
El portavoz de la cancillería alemana, Steffen Seibert, se mostró cauto en horas previas al afirmar: “Que este viaje tenga lugar significa un rayo de esperanza, pero no más”, advirtió.
Las autoridades en Kiev rechazan un diálogo directo con los rebeldes y los calificaron en reiteradas oportunidades de terroristas. Poroshenko rechazó también la federalización de Ucrania propuesta por Rusia. Agencias





