Bruselas.— La policía belga mató el jueves a dos presuntos yihadistas que abrieron fuego en su contra, durante un operativo efectuado como parte de una decena de acciones contra un grupo que estaba a punto de lanzar “ataques terroristas a gran escala”, dijo un fiscal federal en una conferencia de prensa. El país elevó su alerta terrorista a nivel tres, de una escala de cuatro.

Un tercer hombre fue arrestado durante la operación en la ciudad oriental de Verviers, indicó Eric Van Der Sypt, vocero de la fiscalía federal, diciendo que por el momento no se había establecido una conexión directa con los ataques de la semana pasada en París.

Van der Sypt dijo que la policía estaba sobre la pista de un grupo que había regresado de Siria. No hubo policías heridos en la acción, indicó.

“Los sospechosos abrieron fuego de forma inmediata y durante varios minutos con armamento militar y pistolas contra las unidades especiales de la policía federal antes de ser neutralizados”, afirmó. Según el diario belga Le Soir, los ataques eran “inminentes”.

Testigos que hablaron con la radio RTBF describieron varias explosiones, a las que siguieron disparos en el centro de Verviers, cerca de una panadería y en el vecindario donde está la estación de trenes. Un video subido a internet mostró lo que parecía ser el operativo, en que se veía un edificio en medio de explosiones, disparos y sirenas, así como un incendio.

Anoche, el portavoz del primer ministro Charles Michel, Frédéric Cauderlier, reveló que el operativo antiterrorista se preparó durante meses.

Previamente, Michel se reunió con los ministros de Interior, Jan Jambon, y Justicia, Koen Geens, en una sesión de crisis. Los tres políticos siguieron el operativo “minuciosamente planeado” desde el principio, afirmó Cauderlier.

La redada se da en medio de una cacería internacional por los posibles cómplices de los agresores que asesinaron a 17 personas en Francia el 7 de enero. Esos atentados, realizados por hombres que aseguraron ser leales al Estado Islámico y a la rama de Al-Qaeda en Yemen, han aumentado los temores de más ataques en toda Europa.

Ayer mismo, en Alemania la policía realizó una serie de registros en numerosos pisos de islamistas radicales en la localidad de Pforzheim, en el sur del país, informó la Fiscalía de Karlsruhe.

Estos registros se enmarcaron en una investigación bajo la sospecha de que estuvieran preparando un acto violento que amenace la seguridad del Estado. Las autoridades incautaron pruebas, pero no dieron más detalles y no hubo detenidos. “Los registros no tienen conexión alguna con el atentado terrorista en París”, afirmó una portavoz de la Fiscalía. Agencias