Washington.— Con los ecos de los atentados terroristas en París y Copenhague y el brutal ajusticiamiento de 21 cristianos coptos de origen egipcio en Libia, el presidente Barack Obama será mañana el anfitrión de una cumbre contra el terrorismo extremista en Estados Unidos, amenaza creciente que mantiene en duermevela a los servicios de inteligencia y al aparato de seguridad.

En el cónclave, que durará tres días, se reunirán en la Casa Blanca funcionarios con líderes religiosos, comunitarios, empresarios vinculados al mundo de las redes sociales y expertos en seguridad, a fin de tratar de atajar una amenaza que ha sido explotada por organizaciones como el Estado Islámico (EI).

“Básicamente nuestro objetivo es atacar la marginación en ciertas comunidades o minorías étnicas a donde el mensaje del extremismo ha ganado adeptos”, dijo un funcionario de la Casa Blanca al asegurar que, aunque la ambición es que este primer paso permita extender un plan de acción a países de la Unión Europea, por el momento la intención es atender el fenómeno del extremismo en barrios marginados en EU.

A manera de ejemplo, funcionarios de la Casa Blanca citaron el caso de un grupo de jóvenes migrantes de la comunidad somalí que recientemente viajaron a Somalia a sumarse a la jihad de la mano de organizaciones vinculadas al EI o a Al-Qaeda.

“Esperamos que este primer esfuerzo se traslade hacia otros escenarios fuera de EU. Pero, por el momento, nos interesa que nuestras comunidades sean más resistentes. Nos interesa saber de qué forma podremos ser más capaces de identificar a las comunidades vulnerables a los procesos de reclutamiento del extremismo religioso”, aseguró un funcionario de la Casa Blanca.

Además, se trata de detectar la vulnerabilidad de las comunidades no sólo frente al extremismo violento de Medio Oriente, sino a otras formas de extremismo violento como los grupos de extrema derecha que han conformado milicias armadas hasta los dientes en distintos puntos de EU.

Como parte de los trabajos, el gobierno dedicará una larga sesión al capítulo de las redes sociales que se han convertido en correas de transmisión de propaganda y en poderosos vehículos de reclutamiento.

La celebración de esta cumbre sin precedentes se produce luego de un largo rosario de incidentes y ataques como los protagonizados en mayo de 2013 por los hermanos Tamerlán y Dzokhar Tsarnaev, autores del atentado contra el maratón de Boston, y varios incidentes contra personal militar en bases de Texas, o en centros de reclutamiento en Arkansas.

“El extremismo se ha expandido en EU. El problema, particularmente entre los lobos solitarios, es que los motiva una errónea interpretación del islam, algo que denuncian muchos miembros de la comunidad musulmana que no pueden ser estigmatizados”, dijeron fuentes de la administración.