aviso-oportuno.com.mx

Suscríbase por internet o llame al 5237-0800




Crisis hunde logros en España

Ana Anabitarte Corresponsal Madrid| El Universal
Domingo 08 de marzo de 2015
Crisis hunde logros en Espaa

La eurodiputada Elena Valenciano, antes de una sesión del Parlamento Europeo en Estrasburgo. La legisladora cuestiona la visión conservadora de la educación en España que se niega a enseñar que un hombre es igual a una mujer.. (Foto: ESPECIAL )

Recortes a sanidad, educación y servicios sociales no sólo causaron un estancamiento sino un retroceso en los derechos de la mujer

Hace 35 años, cuando el país vivía la dictadura de Francisco Franco (1939-1975), las mujeres españoles no podían trabajar, ni viajar, ni testificar en un juicio, ni abrirse una cuenta corriente en un banco sin el permiso de su marido o de su padre, ni divorciarse, ni utilizar métodos anticonceptivos, ni abortar. Además, si eran adúlteras o vivían con un hombre sin estar casadas cometían un delito penado con la cárcel (frente a los hombres que quedaban impunes), y si tenían hijos la patria potestad era exclusiva del “cabeza de familia”.

La mujer vivía sin entidad jurídica y la mayoría no sólo no trabajaba, sino que tampoco iba a la universidad. Su papel estaba reducido al de esposa y madre abnegada. Debía casarse, tener los hijos “que Dios mande” y quedarse en casa cuidando de la familia.

Con la llegada de la democracia y la aprobación de la Constitución de 1978, la mujer española adquirió una igualdad legal plena con el hombre. Y ahora no sólo puede trabajar, viajar, casarse, votar, abortar y utilizar métodos anticonceptivos libremente, sino que la mayoría ha estudiado una carrera universitaria, muchas se han incorporado al mercado laboral y cada vez ocupan más cuotas de poder en la sociedad.

Sin embargo, la llegada de la crisis económica en el 2008 y la aprobación de una serie de recortes en educación, sanidad y servicios sociales, además de la aprobación de la reforma laboral (que establece peores condiciones laborales además de abaratar y facilitar el despido) por el gobierno del conservador Mariano Rajoy (Partido Popular, PP) han provocado no sólo un estancamiento en los derechos de la mujer sino una regresión.

Y tal y como muestran las estadísticas, por primera desde la llegada de la democracia las mujeres están dejando de trabajar para volver al hogar a cuidar de sus hijos, de personas mayores o de personas dependientes. La razón: los recortes han provocado que no tengan ayudas para acceder a guarderías públicas, ni a becas de comedor, ni a becas de libros, ni a rutas escolares, ni a centros de atención a personas mayores. Además, los trabajos que les ofrecen son con salarios tan bajos que con ellos no pueden pagar una guardería ni un centro de mayores privado, ni contratar una persona que les ayude con los niños o con sus familiares dependientes. Sólo en los dos últimos años del gobierno de Rajoy unas 100 mil mujeres se han visto obligadas a abandonar el mercado laboral para cuidar de sus familiares, según un informe elaborado por el sindicato mayoritario UGT (Unión General del Trabajo).

“Cada vez más las mujeres españolas de ahora se están pareciendo a las mujeres del franquismo. Es decir, se quedan en casa para cuidar de sus hijos o de sus mayores, han dejado de ser económicamente independientes y vuelven a tener un papel sumiso ante el hombre”, denuncia Elisa García, responsable del área de mujer del sindicato Unión General del Trabajo (UGT) en entrevista con EL UNIVERSAL. “Y esa vuelta al hogar está propiciando, además, una regresión en la igualdad de derechos entre hombres y mujeres. Y también y desgraciadamente, un incremento de la violencia de género”, añade.

En su opinión, esto se debe a las políticas públicas que ha puesto en marcha el gobierno de Rajoy, que califica de “rancias” y que no sólo no apuestan por la igualdad entre hombres y mujeres sino que están expulsando a las mujeres del mercado laboral.

También ello explica que un tercio de las jóvenes españolas acepten ser controladas por sus novios, según refleja la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). “Ven a sus madres haciendo el rol que hacían las mujeres en el franquismo. Es decir, el de una mujer que cuida de su familia y que depende del hombre. Eso, unido a lo que ven en los medios de comunicación, en la publicidad, en las películas y en las series de televisión que muestran una dependencia emocional de las mujeres frente a los hombres, hace el resto”. La eurodiputada Elena Valenciano cree también “que la publicidad y la producción audiovisual es una gran responsable de la difusión de estereotipos sexistas”. Considera que los consejos audiovisuales y las asociaciones de autocontrol de la publicidad “tienen que rechazar que a través de los medios de comunicación y de la publicidad se banalice la imagen de la mujer”.

Valenciano, quien desde 1999 a 2013 fue presidenta de la Fundación Mujeres, también responsabiliza de esta regresión al gobierno de Rajoy y dice que lo que ha fallado es la educación. “Los conservadores en España se han negado siempre a que en la escuela se enseñe que un hombre es igual a una mujer y viceversa; que las mujeres deben rechazar el desprecio de sus compañeros aunque vaya envuelto en cariño porque es un anuncio de un comportamiento violento”.

La eurodiputada, que fue también vicesecretaria general del PSOE hasta hace un año, recuerda las leyes que aprobó el gobierno de Rodríguez Zapatero como la Ley de Igualdad, la Ley contra la Violencia de Género, la Ley de Derechos Sexuales y Reproductivos, que califica de “definitivas” para los derechos de la mujer.

Sin embargo, denuncia que la Ley de Violencia de Género no es efectiva en sí misma, como lo demuestra el que cada semana una mujer está siendo asesinada por su ex pareja.

“La Ley contra la Violencia de Género necesitaba y necesita mucha campaña de concienciación y de información y mucha inversión de apoyo para que las mujeres que denuncian sean apoyadas, recogidas, acompañadas y en definitiva protegidas”, asegura.

Y denuncia que el gobierno del PP lo que ha hecho ha sido “relajar la presión contra el maltrato y las medidas, recortar la inversión, y el resultado es que el contador no baja. No baja nunca”, dice.

“Falta además eficacia en el control de los maltratadores, que incluso denunciados y con condenas recientes son capaces de seguir acechando a sus víctimas. Hace falta más control y más sistemas de alerta. En eso también se ha recortado”, denuncia.

En su opinión se está avanzando muy despacio en la igualdad entre hombres y mujeres y habría que hacer muchas cosas, pero lo primero de todo es “entender que no es una cuestión ideológica; la igualdad es de derecho y debe ser cada más de hecho”.

Lo más importante es “no retroceder”. “Si nosotras hemos podido avanzar en igualdad con el apoyo de nuestras madres, no podemos dejar que nuestras hijas, por la crisis económica o un relajamiento en el respeto entre hombre y mujeres, vayan para atrás”. “Y, por supuesto, la más eficaz inversión es la educación. Ese ha sido el gran salto y es la herramienta más eficaz”, concluye.



Ver más @Univ_Mundo
comentarios
0