Ataques en Francia, una señal para despertar
Video. En el Ayuntamiento de Montreuil, en las afueras de París, se celebró el funeral de Tignous, uno de los cuatro grandes caricaturistas franceses asesinados hace ocho días en el atentado yihadista contra la revista
Jerusalén.— Los atentados de los últimos días en París fueron la punta del iceberg, a menos que se haga algo drástico, sin demora, en la lucha contra el radicalismo islámico que llega también a Europa.
Así lo afirma el profesor Uzi Rabi, director del Centro Moshe Dayan del Estudios de Medio Oriente y África en la Universidad de Tel Aviv. No tiene dudas de que la guerra impuesta por los fundamentalistas a Occidente ya ha comenzado, y cruzado el umbral, y que dependerá de la determinación de Europa, el que pueda o no salir victoriosa.
La cuestión probablemente más compleja para Europa a raíz de lo sucedido, en opinión de este catedrático israelí experto en islam y Medio Oriente, es que “en esta lucha , Europa tendrá que matar algunos de los valores en base a los cuales siempre ha vivido”.
De lo contrario, asegura, “el Estado Islámico y Al-Qaeda captarán la debilidad y atacarán con mayor fuerza todavía”.
Cambio de reglas. Rabi es terminante: “Lo que ocurrió en París fue como la señal de un despertador. Es algo que cambia las reglas del juego. Es como el 11 de septiembre, para Europa”, dice en declaraciones a EL UNIVERSAL.
Uno de los primeros elementos que le chocan, y probablemente en ello incida también el hecho que es ciudadano israelí, es que “en ningún lado hablan de fundamentalismo islámico ni terrorismo islámico”.
“En parte, es un problema de la Constitución francesa, que no lo permite, porque ello podría ser visto como difamación hacia una comunidad entera”, asegura Rabi.
“Pero al mismo tiempo, se considera que no es políticamente correcto usar dichos términos. Y mi análisis es que si no se llama a las cosas por su nombre, si no se identifica claramente el problema, no se lo podrá resolver”.
Este experto israelí trata de poner las cosas en su dimensión correcta, sin necesariamente ser diplomático, convencido de que con ello, dice las cosas tal como son.
“Hay mil 500 millones de musulmanes en el mundo. La aplastante mayoría son ciudadanos que se oponen a todo esto y sólo quieren vivir tranquilos. Pero entre ellos hay numerosos que se abrazan a una ideología radical”, asegura el experto.
Rabi enfatiza todavía: “Sería faltar a la verdad decir que todos los musulmanes son terroristas, pero lamentablemente, casi todos los terroristas son musulmanes y se nutren de una ideología radical en nombre de la cual cometen barbaridades y matanzas”.