"Queremos ser otra vez dueños de nuestra casa"
"Lo importante es que Syriza podría restituir a Grecia parte de la riqueza perdida con esta crisis y, sobre todo, su dignidad, para que no siga siendo considerado un país periférico y enfermo de Europa". (Foto: )
Atenas.— “Grecia no saldrá del euro, pero la llamada Troika (Fondo Monetario Internacional, Banco Central Europeo y Comisión Europea) no puede decirnos cómo gobernarnos; Syriza impondrá impuestos a quien nunca los ha pagado y a los que han sacado su dinero del país”, dice el profesor Antonis Liakos, presidente de la Comisión Internacional de la Historia y Teoría de la Historiografía, autor de diversos libros, analista político y uno de los intelectuales más reconocidos en Grecia.
Profesor, causó sorpresa en Europa que Alexis Tsipras, líder de Syriza, dijera que no respetará los acuerdos firmados entre el anterior gobierno de Atenas y la Troika, pero también que Grecia no saldrá del euro. ¿Cuáles son entonces los acuerdos que no respetará?
Una cosa es la deuda y otra es el memorándum relacionado con la política interna griega. Tsipras ha separado estas dos cosas. Por una parte, renegociará la deuda para ampliar los plazos de pago y reducir sus intereses y así, junto con otras medidas, hacer crecer el PIB sin incrementar la deuda que al inicio era de 120 mil millones de euros y ahora ha llegado a 170 mil millones. Otra cosa es el memorándum, que toca cuestiones internas, hospitales, medicinas, escuelas, despidos en el sector público, etc. Lo que pide Syriza es que nadie, la Troika o la Unión Europea (UE), pueda decirnos o imponernos la manera de conducir nuestra política interna.
Pero la austeridad que exige Europa es justamente para evitar el incremento de la deuda pública. ¿No cumplir con el memorándum no es ir contra Europa?
No, porque todo esto depende del balance del Estado, que era deficitario, pero con las medidas que propone Tsipras se podrá equilibrar no sólo con los recortes sino, por ejemplo, con nuevos impuestos a los sectores más pudientes y a los que han sacado el dinero del país, armadores, constructores, etc. La idea de Tsipras es reordenar la economía encontrando dinero internamente, sin apegarse a las reglas impuestas desde el exterior. Lo que pretende Syriza es que volvamos a ser los dueños de nuestra casa.
Tsipras ha dicho que su primera acción no será ir a Berlín, sino a Chipre. Esto tienen un significado importante.
Todos sostienen que la patrona de Europa es Angela Merkel, cuando en la Unión Europea hay instituciones. Lo que no quiere el líder es llegar a un acuerdo con la canciller, sino con las instituciones, porque si hace lo contrario será un líder débil, mientras que si se dirige a las instituciones es posible que hasta encuentre el apoyo de otros países.
Syriza necesita la mayoría en el Parlamento para gobernar, lo cual sería posible si en éste entran sólo 6 partidos, ya que con un número mayor las cosas se complicarían enormemente.
En efecto, porque no bastaría el premio de mayoría, 50 curules, que se da al partido vencedor. Para gobernar sin alianzas Syriza necesita al menos un 40% de los votos que, con el premio de mayoría, le daría derecho a más de 150 curules de los 300 en juego. Si gana con un menor porcentaje, todo dependerá del número de partidos en el Parlamento, 3.5% de los votos es el mínimo exigido para entrar. Como el partido ha dicho que no formará una coalición, en caso de no obtener esta mayoría se tendrá que ir a nuevas elecciones.
Usted y otros intelectuales ven con escepticismo que Syriza pueda cumplir con todas sus promesas.
Mi escepticismo va más allá. Está relacionado con la política en general, pero lo que dice es cierto. Ningún partido puede cumplir todas sus promesas electorales, por lo cual Syriza debe concentrarse en los problemas esenciales, que son los de la economía.
El problema es que su programa, al no ser de largo plazo, no contempla una transformación capaz de responder al neoliberalismo. La crisis actual es el resultado de las reglas que este modelo ha impuesto a nuestro país, pero no es fácil encontrar uno diferente y más justo.
No obstante lo anterior, lo importante es que Syriza podría restituir a Grecia parte de la riqueza perdida con esta crisis y, sobre todo, su dignidad, para que no siga siendo considerado un país periférico y enfermo de Europa.