"No se vale quedarse callados"

"Cuando se es demócrata no se puede callar ante esta serie de atropellos... No pueden callar y dar la espalda a una realidad donde se están violando los derechos humanos de millones...". (Foto: J. JAIME HERNÁNDEZ )
Washington.— Con los ecos de una campaña de detenciones y hostigamiento contra los líderes de la oposición en Venezuela, Carlos Vecchio, Coordinador Nacional del partido Voluntad Popular y uno de los más estrechos colaboradores del líder opositor venezolano Leopoldo López, encarcelado hace más de un año, pidió desde esta capital a los gobiernos de Latinoamérica en general —y de México en particular—, dejar de mirar hacia otro lado y pronunciarse contra la campaña de detenciones y linchamientos mediáticos y judiciales contra quienes critican al presidente Nicolás Maduro.
Carlos Vecchio ha asumido su condición de venezolano exiliado en EU desde hace casi 7 meses. La suerte que han corrido otros líderes de la oposición, como López y ahora el alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, le han obligado a guardar distancia de las fuerzas de seguridad del gobierno venezolano, que lo tienen en la mira.
Hace dos semanas, Vecchio se entrevistó con el Secretario General de la OEA, José Miguel Insulza, para advertirle contra la amenaza de una serie de detenciones y encarcelamientos que hoy son una realidad. “Se lo advertí desde hace dos semanas. Y ahora es una triste realidad”, dice Vecchio en una entrevista con EL UNIVERSAL.
“Estamos ante una nueva oleada de detenciones, no sólo el alcalde de Caracas, sino de empresarios, de estudiantes. La ola represiva crece y se ha hecho mayor. Y las razones de las protestas que se dieron hace un año son hoy más profundas. Hoy estamos viendo una mayor crisis económica. Una mayor crisis social. Una evidente crisis política.
“Cuando estamos hablando de principios democráticos, de respeto a los derechos humanos, eso no tiene fronteras, no tiene nacionalidad... Esta situación requiere el acompañamiento de la comunidad internacional y que los países de la región volteen a vernos. Que quienes hoy suscriben la Carta Interamericana Democrática, donde se establecen los elementos esenciales que deben acompañar a una democracia, los países adscritos a esta carta están obligados a tomar cartas en el asunto y no desentenderse del caso para que en Venezuela haya libertad de expresión, y una pluralidad política sin persecución...”
¿Qué le pediría al Presidente de México, Enrique Peña Nieto?
Le diría que siendo un líder y un hermano en la región no se desentienda de lo que esta ocurriendo en Venezuela, donde se están violando los derechos humanos. No es válido estar callado en este momento. Cuando se es demócrata no se puede callar ante esta serie de atropellos. Y lo mismo los otros gobiernos de la región. No pueden callar y dar la espalda a una realidad donde se están violando los derechos humanos de millones...
¿Exagera la prensa internacional la realidad de Venezuela?
Yo creo que no. Y para quienes tenemos amigos y familia sabemos muy bien que es más duro vivir la realidad de hoy en Venezuela que leerla a través de los medios internacionales. Hoy en Venezuela tenemos uno de los índices de inflación más altos en el mundo. Tenemos una crisis de desabasto que la sufren cientos de miles en distintos puntos del país. Tenemos casos evidentes de persecución política y encarcelamiento como la que ha sufrido el alcalde de Caracas.
En pocas palabras estamos viviendo una crisis de enormes proporciones y no podemos esperar más tiempo para que la crisis vaya a más. Nuestra obligación es hacer sonar la señal de alarma ante la comunidad internacional para que arrimen el hombro porque las cosas pueden ir a peor...
En los últimos meses hemos visto como las reglas de confrontación entre Caracas y Washington han pasado de la cautela de hace meses a la denuncia desde la Casa Blanca y el Departamento de Estado, que han considerado que el gobierno venezolano no puede seguir con este ambiente de persecución y encarcelamiento de los líderes de la oposición. ¿Cómo valora usted este cambio?
Estados Unidos efectivamente ha modificado no el sentido, pero sí el énfasis de su mensaje hacia Venezuela. Desde el primer momento ha lamentado el ambiente de persecución y violación a los derechos humanos. Pero también habría que destacar que estas denuncias no sólo las ha hecho Estados Unidos, sino diversos organismos internacionales como la ONU, que ha pedido la liberación de Leopoldo López y ha exigido el respeto de los derechos humanos en Venezuela.
Hoy ya existe un movimiento internacional que insiste en llamar la atención de lo que ocurre en Venezuela al que se han sumado países como Colombia o Brasil, si se quiere, de forma muy diplomática. Pero hoy ha llegado el momento en que toda la comunidad internacional voltee la mirada hacia la crisis en Venezuela antes de que sea demasiado tarde...





