Los extremistas islámicos mataron en Kenia a 174 personas en 2014, según la policía del país, lo que supone la mayor cifra de muertos en los tres años de violencia atribuida a los milicianos de al-Shabab, procedentes de la vecina Somalia.

Un total de 312 personas murieron en atentados milicianos en el país desde 2012, según estadísticas publicadas el miércoles por la policía de Kenia, y 779 resultaron heridas durante ese periodo.

Al-Shabab ha prometido vengarse de Kenia por enviar tropas a Somalia. Kenia desplegó sus tropas en Somalia en octubre de 2011 para combatir a los rebeldes extremistas, que habían realizado varios ataques transfronterizos que incluyeron el secuestro de cuatro europeos.

En un video difundido el sábado, el grupo armado amenazó con más atentados como el ataque en 2013 contra el centro comercial Westgate en Nairobi, donde murieron 67 personas.

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