Tiene 13 años de edad, de más joven quería ser piloto cuando fuera mayor, pero actualmente su deseo es convertirse en un joven soldado yihadista y decapitar soldados "como dice Allah", pues asegura que "Occidente pronto estará terminado".

"Me gusta el Estado Islámico ya que siguen la Sharia y matan infieles, a los no sunitas y a quienes dejaron el islam", dice Abu Hattab, como quiso ser conocido durante una entrevista con la BBC.

Hattab nació en Siria pero vive en Turquía. Ha recibido las primeras clases de instrucción en religión y armas y pasa su tiempo viendo videos de yihadistas e incluso ha contactado a algunos miembros del grupo islamista con quienes conversa a través de Facebook.

Pero por qué no disfrutar de tu niñez, le pregunto la BBC, a lo que respondió:

"No quiero salir con amigos o pasarlo bien. Allah nos ordenó trabajar y pelear por la vida que sigue, por el paraíso. Antes iba al parque o a la playa, pero me di cuenta de que estaba mal y ahora tomé el camino correcto". 

Su madre, 'Fatima', apoya la idea del joven: "Yo no estaría triste si él mata a los occidentales (...) estoy avergonzada de que mis otros hijos estén trabajando pacíficamente para la sociedad civil. Deben tomar las armas", dice a la BBC.

El menor considera que "las personas asesinadas por Estado Islámico son agentes estadounidenses. Tenemos que decapitarlos como dice Allah en el Corán", sentencia.

Asimismo da por hecho que "Gran Bretaña debe ser atacada porque está en la OTAN y está en contra del Estado islámico".

Desafiante, Abu Hattab dijo estar dispuesto a atacar en Turquía "si recibe una orden sagrada".

El Estado Islámico está utilizando niños soldados que despliega como terroristas suicidas y francotiradores, según reportes de Human Rights Watch.

A través de las redes sociales, yihadistas han difundido videos donde muestran el reclutamiento y aleccionamiento en armas a niños en los territorios sirios que están bajo su control.

"El grupo enseña a los niños su ideología bajo el disfraz de educación, los entrena en el manejo de armamento y los hace participar en hostilidades", dijo Paulo Sergio Pinheiro, presidente de la comisión de la ONU que investiga crímenes en el conflicto sirio, al presentar en septiembre pasado el último informe de la comisión al Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas.

ahd