El líder ultranacionalista y pro colono judío, Naftalí Bennet, miembro de la coalición de gobierno, pidió al primer ministro, Benjamín Netanyahu, que desbloquee la construcción de colonias en Cisjordania, pese a que es una actividad considerada ilegal por la comunidad internacional.

Según una información divulgada hoy por el diario progresista Haaretz, el líder de Habayit Hayehudi y ministro de Economía amenazó con la ausencia de su partido de la próxima votación de confianza en el Parlamento, si su exigencia no es escuchada.

Una amenaza que si bien no conducirá a la ruptura de la endeble coalición de gobierno, a la que Habayit Hayehudi aporta 12 diputados, supondrá una prueba más de su inestabilidad, argumenta el rotativo.

De acuerdo con su información, Bennet y Uri Ariel, compañero de formación y ministro de Vivienda, "se reunieron este miércoles con Netanyahu al que le exigieron la reanudación inmediata de la construcción, así como de las reuniones con los Comité de Planificación de la Administración Civil".

"Ninguna de las oficinas de los tres quiso comentar el encuentro", explicó Haaretz, el cual asegura que, al parecer, Bennet y Ariel se quejan que desde que se sacaron a concurso las licitaciones en junio para la construcción de un millar de casas cerca de la ciudad palestina de Hebrón "se ha decretado un bloqueo sin anuncio público".

"Una fuente conocedora del encuentro aseguró que Bennet y Ariel le dijeron a Netanyahu que esperan una respuesta antes del lunes, día en el que el Parlamento inicia su sesión de invierno", precisó el rotativo.

"Hay una moción de confianza ese día y, de acuerdo con la fuente, los dos advirtieron a Netanyahu que, si su demanda no era atendida, los diputados de Habayit Hayehudi podrían ausentarse durante la votación", agregó.

Tanto Estados Unidos como la Unión Europea exigen a Israel que detenga la construcción de colonias en territorio palestino, ya que además de ser ilegales ponen obstáculos al eventual éxito de la solución negociada de los dos estados.

La decisión de Israel de anunciar el concurso para la construcción de más de 2 mil viviendas en un barrio árabe de Jerusalén minutos después de la reunión de Netanyahu y el presidente estadounidense, Barack Obama, en Washington, elevó el malestar de su aliado.

La organización israelí de defensa de los derechos humanos "Paz Ahora" advirtió que ese nuevo asentamiento cortará la continuidad territorial de Palestina y hará inviable la solución de los dos Estados.

jlc