DONETSK (Agencias).— Al tiempo que el gobierno de Ucrania aseguró ayer que retirará sus armas pesadas de la zona de conflicto en el este del país sólo después de que los separatistas cumplan plenamente con la tregua pactada, miles de rusos protestaron contra la guerra en Ucrania.

El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Andrei Lisenko, señaló en Kiev que el gobierno pondrá en marcha “paso a paso” el nuevo acuerdo con los separatistas para establecer una zona desmilitarizada, comenzando con el cese del fuego.

“Mientras no se cumpla el primer paso no estamos hablando de los otros”, citó a Lisenko la agencia Interfax Ucrania. Habrá retirada de tropas si las milicias ucranianas también se retiran, dijo.

Los separatistas se habían quejado previamente de que las fuerzas del gobierno no estaban cumpliendo con lo pactado en un acuerdo.

El convenio, que entraba ayer en vigor, establece que ambas partes tienen que retirar sus armas pesadas de una zona de 15 kilómetros a cado lado de la línea del frente.

El área de Donetsk permaneció relativamente en calma y fuentes rebeldes dijeron que el Ejército se retiró de algunas posiciones para evitar caer en un cerco.

Por otra parte, la Marcha de la Paz, organizada por la oposición extraparlamentaria más crítica con el Kremlin, arrancó en la emblemática plaza Pushkin, donde muchos de los manifestantes se congregaron con banderas ucranianas, pero también rusas. “Putin, basta de mentir y de hacer la guerra”, fue uno de los eslóganes de la marcha, según Alexandr Riklin, dirigente del movimiento opositor Solidaridad.

Los organizadores exigieron al presidente ruso, Vladimir Putin, que deje de apoyar a los insurgentes, que ordene el repliegue de las tropas de Ucrania e inicie casos penales contra aquellos que obligaron a soldados rusos a combatir en territorio extranjero. La policía de Moscú dijo que al menos 5 mil personas acudieron a la Marcha por la Paz.