No me toma por sorpresa, había signos que indicaban que algo se estaba moviendo. Por ejemplo la serie de editoriales del New York Times en los últimos tiempos. Fue un obsequio de cumpleaños para el papa Francisco que cumplió años ayer.

Podemos decir que es el primer milagro del Pontífice. México no tomó parte en este diálogo entre Estados Unidos y Cuba a pesar de la buena voluntad que ha mostrado con la condonación del 70% de la deuda y de las visitas oficiales realizadas por el gobierno mexicano.

Observo tres puntos negativos para México ante la posible normalización de las relaciones bilaterales de Estados Unidos y Cuba: México ya no podrá utilizar en su política exterior la carta diplomática como negociación ante Estados Unidos como lo fue en el pasado.

Creo que el turismo estadounidense preferirá las playas de la isla por la novedad que representará y también afectará a numerosos empresarios mexicanos que estaban de alguna forma triangulando sus mercancías entre Cuba y Estados Unidos por motivo del embargo, al no existir los empresarios tendrán que actualizar sus modelos de negocios.

Doctor en Letras Iberoamericanas por la UNAM, nacido en Cuba y nacionalizado mexicano