MOSCÚ (Agencias).— El ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguei Lavrov, instó ayer a Kiev a cesar de inmediato su operación militar en el este de Ucrania.

Tras las elecciones presidenciales y la victoria del multimillonario Petro Poroshenko tiene que acabar la violencia sin demora, señaló Lavrov, citado por la agencia Interfax. La fuerza aérea ucraniana está bombardeando posiciones de los separatistas prorrusos en las regiones de Luhansk y Donetsk.

Los rebeldes aseguran que hubo decenas de muertos desde el domingo, cuando se proclamó la victoria de Poroshenko, quien había anunciado que intensificaría la “operación antiterrorista”.

“El objetivo número uno y la prueba de solidez de las autoridades de Kiev, teniendo en cuenta los resultados de las elecciones presidenciales, es el cese inmediato del empleo del ejército contra la población y el fin de cualquier violencia por las partes”, dijo Lavrov en rueda de prensa.

También el presidente ruso, Vladimir Putin, pidió el cese inmediato de la ofensiva militar ucraniana en una conversación telefónica con el primer ministro italiano, Matteo Renzi.

“Putin subrayó la necesidad de poner fin inmediatamente a las operación militar de castigo en las regiones del sureste de Ucrania y a comenzar un diálogo entre las autoridades de Kiev y los representantes regionales”, señaló el servicio de prensa del Kremlin.

Reporteros de Reuters contaron 20 cuerpos en uniforme de combate en una habitación de un depósito de cadáveres de la ciudad de Donetsk. Algunos cadáveres tenían miembros mutilados, señal de que el gobierno usó un gran poder de fuego contra los rebeldes por primera vez.

“Desde nuestro lado hay más de 50 (muertos)”, dijo el primer ministro de la autodenominada República Popular de Donetsk, Alexander Borodai, en el hospital de la ciudad.

Después de que rebeldes capturaron el aeropuerto de Donetsk el lunes, fueron atacados por cazas y helicópteros ucranianos. Kiev desplegó también paracaidistas como parte del asalto.

Pero los tiroteos continuaron durante toda la noche y el ayer la vía que conduce al aeropuerto exhibía señales de combates. Un intenso fuego de ametralladoras se podía oír a la distancia a mitad de la mañana.

“El aeropuerto está completamente bajo control”, dijo el ministro del Interior, Arsen Avakov, a la prensa en la capital, Kiev. “Los adversarios sufrieron grandes pérdidas. Nosotros no registramos pérdidas”.

“Vamos a continuar la operación antiterrorista hasta que ni un solo terrorista quede en el territorio de Ucrania”, dijo el viceprimer ministro Vitaly Yarema en el marco de una reunión del gobierno.

En tanto, fuentes oficiales señalaron que miembros de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) de nacionalidad danesa, suiza, estona y turca están siendo retenidos en Ucrania por separatistas prorrusos en el marco de los duros enfrentamientos en Donetsk y Luhansk.

“Estamos en estrecho contacto con los familiares”, dijo a la agencia danesa Ritzau el ministro de Comercio y Desarrollo danés Mogens Jensen, que dio a conocer el paradero de los observadores desaparecidos desde el lunes por la noche. Jensen señaló que los observadores parecen no correr peligro, por ahora.

Desde Washington, el presidente estadounidense Barack Obama llamó a Poroshenko para felicitarle por su victoria en las presidenciales de Ucrania y le ofreció “todo el apoyo” para “unificar su país y hacerlo avanzar”. Obama instó a Poroshenko a implementar lo antes posible una serie de reformas para “unir el país y desarrollar una economía sostenible, un clima atractivo para los inversores y un gobierno transparente y responsable que responda a las preocupaciones y aspiraciones de todos los ucranianos”.

Anoche mismo comenzó la cumbre informal de líderes de la Unión Europea (UE) n la que analizarán los resultados de las recientes elecciones europeas y repasarán la situación en Ucrania.

“Esperamos de los líderes de la UE decisiones resueltas, y diría incluso valientes, en vistas de detener el comportamiento orquestado por los líderes del Kremlin”, dijo Kostiantyn Yelisieiev, embajador ucraniano ante la UE, poco antes de que iniciara el encuentro. Lavrov tachó de “ridículos” los pretextos para sancionar a Rusia.