WASHINGTON.— Antes de que se anuncie formalmente si contiende o no por la presidencia en 2016, Hillary Clinton ya tiene una lista negra de quienes podrían ser borrados del mapa político en caso de que llegue a la Casa Blanca.

Según las revelaciones del libro HRC: Secretos de Estado; el renacimiento de Hillary Clinton, de los periodistas Amie Parnes y Jonathan Allen, la ex secretaria de Estado profesa un odio ciego hacia políticos de su tribu demócrata, como la senadora por Missouri, Claire McCaskill, quien decidió apoyar a Barack Obama en la cerrada contienda del 2008 y que, en un insólito arranque de franqueza, llegó a asegurar que nunca dejaría a su hija a solas con Bill Clinton. Este último comentario, según el libro, bastó para que Clinton colocara a McCaskill en la lista de las horribles e indeseables.

Los nombres incluidos en la lista son todos personalidades de gran peso y perfil que contribuyeron a la campaña de Obama cuando éste figuraba en calidad de segundón en las primarias demócratas. Entre ellos, el hoy Secretario de Estado, John Kerry, y el senador demócrata por Vermont, Patrick Leahy, una de las figuras más respetadas.

A Kerry, Hillary no le perdona que, llegado el momento de tomar partido en una agónica lucha por la nominación presidencial, el entonces senador por Massachusetts declarara que Obama “debe ser y será el próximo presidente porque nadie mejor que él dará una nueva credibilidad al papel de EU en el mundo”.

Otro que figura en la lista de los imperdonables, es el hoy fallecido senador, Ted Kennedy, patriarca de un clan que decidió apostar por Obama, provocado el desmoronamiento de los apoyos que con tanto esmero había procurado Hillary en el Partido Demócrata.

Más allá del chismorreo que ha generado el contenido del libro, el hecho de que Hillary sea mostrada como una mujer rencorosa podría dañar su imagen como aspirante a la presidencia en 2016, en momentos en que los demócratas necesitarán cerrar filas para evitar que los republicanos reconquisten la oficina oval.

“Para mí es todo un misterio por resolver. Aún estoy esperando que alguien me llame por teléfono para explicarme por qué razón yo figuro en esa lista negra”, dijo entre irónico y extrañado el congresista demócrata por el estado de Maryland, Chris Van Hollen, quien se ha manifestado a favor de la candidatura de Clinton en 2016.

Según el libro que saldrá a la venta el 11 de febrero, los antiguos asesores de campaña de Hillary recuerdan el método de la ex candidata para elaborar su lista negra: “Queríamos tener un historial de quién nos apoyó y quién no. Y entre aquellos que nos apoyaron, quiénes hicieron verdaderos esfuerzos y quiénes simplemente estaban ahí”.

Si el contenido del libro afecta o no la popularidad de Hillary, lo dirá el tiempo. Por el momento, la ex secretaria de Estado se mantiene como la más firme contendiente a la nominación por el Partido Demócrata, en la que podría medirse con el vicepresidente Joe Biden.