TALLIN / LONDRES (Agencias).— El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y el primer ministro británico, David Cameron, advirtieron ayer por separado que no se dejarán “intimidar” por la decapitación de un segundo periodista estadounidense y la amenaza de muerte a un rehén británico por parte de la organización Estado Islámico (EI) y prometieron que se hará justicia y se defenderán la libertad y la democracia.

Estados Unidos perseguirá al grupo terrorista hasta “las puertas del infierno”, aseguró a su vez el vicepresidente Joe Biden. “Los seguiremos hasta las puertas del infierno, hasta que sean llevados ante la justicia. Porque el infierno es el lugar donde estarán”, dijo en Washington.

En Tallin, capital de Estonia, Obama prometió crear una coalición para “degradar y destruir” al EI. “No nos dejaremos intimidar. Sus actos horrendos nos unen como país y fortalecen nuestra resolución de llevar la lucha al terreno de estos terroristas”, dijo Obama. “Y quienes cometen el error de herir a estadounidenses aprenderán que no olvidamos, que nuestro alcance es largo y se hará justicia”.

Obama no dio plazos para elaborar una estrategia de ataque al grupo extremista en Siria. “Nos tomará tiempo estar en condiciones de hacerlos retroceder”, dijo el presidente en conferencia de prensa.

El mandatario habló luego de que EU verificó la autenticidad del video que muestra la brutal decapitación del reportero independiente Steven Sotloff, dos semanas después que el periodista James Foley sufrió la misma suerte. Obama juró que EU no olvidará el “crimen terrible cometido contra estos dos magníficos jóvenes”.

El video que mostraba la muerte de Foley se diseminó a gran velocidad a través de las redes sociales el mes pasado, en lo que muchos consideraron un éxito propagandístico de los extremistas.

Por ello, el directivo de la industria tecnológica del Valle del Silicio dijo que el video subido el martes al cibersitio You Tube que mostraba la decapitación de Sotloff fue borrado, lo que detuvo la publicación de enlaces que permitieran verlo. Las compañías han enfrentado una creciente presión para que impongan mayor censura en la red.

Cameron, por su parte, dijo, en una declaración ante el Parlamento británico en Londres, que la decapitación de Sotloff “tendrá el efecto contrario”. Tras confirmar que el Reino Unido no pagará un rescate para liberar a rehenes británicos en manos del EI, ya que esos fondos sólo servirán para “promover el terrorismo”, el premier afirmó que “vamos a defender nuestros valores, la libertad dentro del marco de la ley, y la democracia”.

El video de la ejecución de Sotloff termina con la amenaza de que la próxima víctima será el británico David Cawthorne Haines.

“Acto de salvajismo medieval”

En Washington, el secretario de Estado, John Kerry, calificó como un “acto de salvajismo medieval” la decapitación Sotloff y advirtió que Estados Unidos hará que los responsables rindan cuentas.

“La barbarie, por desgracia, no es nueva en nuestro mundo. Tampoco la maldad. Hemos llevado la pelea contra ello y estaremos llevando la batalla hoy”, dijo Kerry en un breve comunicado. “Nuestras fuerzas especiales han arriesgado una operación militar para salvar esas vidas (la de Sotloff y otros estadounidenses) y hemos contactado diplomáticamente con todo aquel que podría ayudar”, explicó el jefe de la diplomacia estadounidense.

El secretario de Estado dijo que el verdugo de Sotloff, que parece ser la misma persona con acento británico que decapitó a Foley en algún lugar del desierto sirio-iraquí es “un cobarde que se esconde tras una máscara”.

Mientras tanto, el grupo yihadista mató a hasta 770 soldados del ejército iraquí en varias ejecuciones masivas en Irak en junio, tras la toma de Tikrit, aseguró ayer la organización de derechos humanos Human Rights Watch (HRW).