Buenos Aires.— El gobierno de la presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner anunció ayer cambios en su gabinete de ministros y en la cúpula de la Secretaría de Inteligencia, en medio de una serie de rumores y sospechas que circulan en la prensa.

Oscar Parrilli dejará la Secretaría General de la presidencia que ocupa desde 2003 para asumir como nuevo jefe de la Secretaría de Inteligencia (SI), a la que renunció Héctor Icazuriaga luego de 11 años en el cargo.

Regresa Fernández

El portavoz presidencial, Alfredo Scocimarro, informó además en la Casa de Gobierno que el reemplazante de Parrilli será el senador Aníbal Fernández, que volverá a ocupar un cargo en el que se desempeñó en 2002 cuando el jefe de gobierno era Eduardo Duhalde (2002-2003).

De esta manera, el legislador vuelve a integrar el gabinete de ministros. Se trata de uno de los políticos que más años estuvo como funcionario en la gestión kirchnerista, que comenzó con el fallecido ex jefe de Estado Néstor Kirchner (2003-2007).

Fernández, que se convirtió en uno de los hombres fuertes del kirchnerismo, ocupó diferentes cargos en el gobierno. Es contador público, tiene 57 años y fue jefe de Gabinete, ministro de Interior y ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos.

A su vez, también renunció el segundo de la SI, Francisco Larcher, que es señalado como el “jefe de Inteligencia en las sombras”, como indicó el diario La Nación. Lo reemplazará Juan Martín Mena, que hasta ayer era jefe del gabinete del Ministerio de Justicia.

En la prensa trascendió que los cambios podrían responder a que Larcher “es un hombre cercano” al diputado Sergio Massa, ex jefe de gabinete de Fernández de Kirchner y actualmente uno de los principales actores de la oposición.

En este sentido, La Nación señaló que Larcher “era uno de los pocos hombres de extrema confianza” de Néstor Kirchner, pero que en el último tiempo era acusado por dirigentes oficialistas de colaborar con Massa, líder del opositor Frente Renovador peronista.

El saliente numero dos de Inteligencia “cayó en desgracia cuando brindó información errónea a la presidenta sobre la candidatura de Massa en las últimas elecciones legislativas”, ya que Larcher afirmaba que el mismo no se presentaría.

Al final, Massa encabezó la lista del Frente Renovador que en las legislativas de 2013 fue la más votada en la provincia de Buenos Aires, el distrito más importante del país en términos electivos, lo que supuso un duro revés para el gobierno de Fernández de Kirchner.

La oposición reacciona

Ante los cambios anunciados por el gobierno, el diputado Alberto Roberti, del Frente Renovador, afirmó que representan “el regreso a la concentración más absoluta de la política y a las decisiones más radicalizadas”. El diputado Adrián Pérez, del mismo sector opositor, reclamó que haya “transparencia” en la SI en lugar de “un cambio de nombres”.

Esta situación se da en medio de un clima electoral que comienza a agitarse, ya que en octubre próximo serán los comicios presidenciales. Fernández de Kirchner no podrá volver a ser reelegida, ya que acumula dos mandatos consecutivos (2007-2011 y 2011-2015) y la Constitución no permite un tercero. DPA