Jerusalén.— El Shin Bet, servicio de seguridad interna de Israel, reveló ayer que la organización islamista palestina Hamas estaba preparando una serie de atentados contra blancos civiles en Israel, entre ellos “Teddy”—el popular estadio de futbol de Jerusalén—, el tren ligero que recorre gran parte de la capital y una diversidad de poblados a los que pensaban infiltrarse para matar.

Al parecer, lo que estaba en camino era una amplia serie de ataques desbaratados algunos de ellos casi a último momento. Parte del plan era también secuestrar civiles israelíes tanto en territorio israelí como durante viajes al exterior, detonar coches-bombas en distintos puntos del país y colocar cargas explosivas en el camino de automóviles en carreteras.

El ataque al estadio de futbol habría sido el de dimensiones más espectaculares. Cabe recordar que el lugar se llena de miles de personas en los partidos, por cuya asistencia quedan a menudo bloqueadas numerosas calles de la zona. El operativo estaba siendo organizado y financiado desde Turquía, contando con la participación activa de reclutados d Hamas, algunos de ellos mientras estudiaban en universidades de la vecina Jordania.

Según el Shin Bet, aproximadamente 30 palestinos fueron detenidos ya en el mes de septiembre, habiéndose recabado pruebas secretas sobre entrenamientos que habían pasado en Siria y en la Franja de Gaza, donde gobierna Hamas, a la que habían entrado por los túneles que conectan dicha zona palestina con el Sinaí en Egipto.

Una de las singularidades de este plan, además de los blancos elegidos, es el hecho que sus protagonistas eran miembros de Hamas en Cisjordania. En los últimos años, se consideró que la infraestructura armada de Hamas en dicha zona había quedado total o parcialmente desmantelada a raíz del intenso operativo militar israelí del año 2002, llamado “Muro Protector”.

Este fue lanzado por Israel tras la recurrencia de numerosos atentados en la segunda intifada , el más cruento de los cuales se recuerda hasta ahora como “la matanza de Pesaj”, el ataque en el que un suicida de Hamas entró al hotel Park de la ciudad costera de Natania y mató a 30 civiles cuando celebraban la cena de la noche de Pesaj, la pascua judía.

A raíz de dicho atentado, el ejército realizó intensos rastreos y detenciones en Cisjordania, que desbarataron numerosas células de Hamas.

Ahora, según el Shin Bet, los planes revelados demuestran que Hamas realiza “denodados esfuerzos” por renovar “su infraestructura terrorista”.

El Shin Bet estima que ello obligaría a Israel a reaccionar y que en la dinámica que esa situación desencadenaría, Hamas lograría quitar del medio al presidente palestino Mahmud Abbas, tal cual lo hizo en junio del 2007 en la Franja de Gaza.

De fondo hay una situación ambivalente ya que por un lado hay una gran tensión política y diplomática entre Israel y la Autoridad Palestina, pero por otro, no se logra una verdadera reconciliación entre la ANP de Abbas y Hamas. La formación del gobierno apoyado conjuntamente por ambas partes, no ha solucionado los problemas y el riesgo de verse enfrentado por Hamas en Cisjordania, continúa amenazando a Abbas. En agosto, el Shin Bet dijo haber descubierto una red de casi un centenar de miembros de Hamas que planeaban derribar a Abbas y comenzar una tercera intifada. Con información de Agencias