EU vota mañana plan fronterizo
POSTURAS. Manifestantes contrarios a la inmigración ilegal protestan en Indianápolis. (Foto: ARCHIVO / AP )
WASHINGTON.— Los republicanos en la Cámara de Representantes se disponen a votar mañana un proyecto de fondos para enfrentar la crisis en la frontera mediante el envío de fuerzas de la Guardia Nacional y la aceleración de las deportaciones de jóvenes centroamericanos.
El costo sería de 659 millones de dólares en los últimos dos meses del actual año fiscal, mucho menos de los 3 mil 700 millones solicitados por el presidente estadounidense Barack Obama para este año y el próximo.
La medida incluye cambios rechazados por la mayoría de los demócratas, que permitirían enviar rápidamente a decenas de miles de jóvenes centroamericanos de regreso a sus países sin la posibilidad de una audiencia judicial. De los 659 millones, los gobiernos de Guatemala, Honduras y El Salvador recibirían 40 millones de dólares para amortiguar el impacto del flujo de inmigrantes que serán devueltos desde EU.
La cifra es menos de la séptima parte de los 295 millones de dólares prometidos por la Casa Blanca a los presidentes de esos tres países durante la conferencia del pasado viernes en esta capital.
Sin embargo, el sector más conservador del Partido Republicano rechazó el plan, diciendo que “no va lo suficientemente lejos para resolver la situación en la frontera”.
Por su parte, miembros del Partido Demócrata, que dominan el Senado —donde el proyecto tendría que ser avalado si pasa la prueba en la Cámara Baja—, advirtieron que no votarán a favor de una iniciativa que busca enmiendas a la ley contra el tráfico de personas de 2008, que es el único escudo que ha permitido a los niños no ser deportados de forma inmediata para regresar a países como Honduras o El Salvador, de donde huyeron de la violencia y la pobreza.
A diferencia del plan republicano, los demócratas trabajan desde el Senado con un proyecto por 2 mil 700 millones de dólares que cubriría lo que resta del año fiscal.
Además, según adelantó el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, si los republicanos consiguen sacar adelante su iniciativa, los demócratas aprovecharán la oportunidad para vincular su contrapropuesta con la iniciativa de ley de reforma migratoria aprobada en el Senado en junio de 2012.
Congresistas del caucus hispano demandaron ayer a Obama responder al “obstruccionismo y mezquindad” del Partido Republicano. “No sólo han recortado los fondos solicitados, sino que insisten en vincularlos al envío de la Guardia Nacional y a la enmienda de la ley que protege a las víctimas de tráfico de personas de 2008”, señaló ayer el congresista demócrata por Illinois, Luis Gutiérrez.
Gutiérrez dijo que espera que Obama emita pronto nuevas órdenes ejecutivas para aliviar la situación de los indocumentados. Entre las opciones está la expansión del Programa de Acción Diferida (DACA) que ha beneficiado a más de 600 mil jóvenes indocumentados que llegaron con sus padres antes de junio de 2007. La expansión beneficiaría, en principio, a los padres de estos jóvenes que en algunos casos han sido deportados.
Según una encuesta de The Associated Press-GfK, dos terceras partes en EU ven la inmigración ilegal como un “problema grave” y 51% está a favor de modificar la ley de 2008 para facilitar la deportación expedita de los menores centroamericanos. (Con información de agencias)