Nueva York.— La enfermera estadounidense Amber Vinson, la segunda en contraer el ébola en Estados Unidos, superó la enfermedad y fue fuera dada de alta ayer por el Hospital Universitario de Emory, en Atlanta, donde estaba internada.

Al mismo tiempo, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, el secretario d general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon,y la OMS, criticaron las medidas restrictivas contra trabajadores de salud que regresan de África Occidental.

Obama dijo que su país no debería establecer cuarentenas o políticas que podrían desalentar a los trabajadores de la salud a que viajen a África Occidental para ayudar a combatir la epidemia del ébola. Precisó que estos trabajadores deberían ser “aplaudidos, apoyados y debería agradecérseles”.

Mientras Vinson, quien se contagió de ébola tras atender al liberiano Thomas Duncan, era dada de alta, en Florida, el Departamento de Salud informó que comenzó a monitorear a seis personas que regresaron de países afectados por el ébola.

Ban y el portavoz de la Organización Mundial de la Salud (OMS) se mostraron en contra de poner restricciones al personal sanitario sin contar con “una clara base científica”, el mismo día en que Australia dijo que suspendía temporalmente los visados para los viajeros procedentes de países afectados por el ébola. Según la OMS, además de médicos y enfermeras en Sierra Leona, Guinea y Liberia se requieren enterradores. Agencias